CUERNOS CONSENTIDOS POR NUESTRA LIBERALIDAD SEXUAL
( Relatos Cuerno )
Ya era mitad de semana, mi mujer le pide a Ramón que les consulte a los amigos de los viernes si nos vamos a reunir y si están de que ella asista. Por su parte Ramón le pregunta a Raúl, Enrique, Manuel y al último a mi, diciéndome que todos van a ir y que la secretaria de la semana pasada esta bien puesta para atender nuestras vergas, que quedo con muchas ganas, le comente que allí estaría, y solo agregó que el viernes por la mañana afnariamos detalles para organizar la copa, cena, y casa donde se haría, ninguno sabe que la secre que nos cogimos es mi esposa.
En la noche que llegue a casa, mi mujer me ganó estaba en la cocina preparando la cena, solo tenía puesto un baberito que apenas le cubria su panocha y sus tetas se desbordaban por todos lados, se veía muy cachonda, me le acerque por atras agarrandole sus tetas y panocha, y diciendole que rica mujer me toco de esposa. Ella me dijo: te parece. Le repeti claro, eres una super viejota, ella susurro, que bueno que te gusto, por cierto ya me dijo Ramón que si estoy puesta para el viernes, le conteste que sí, o hay algun problema papacito. Le conteste que no, que confirmaba que siempre que tuviesemos alguna propuesta de aventura sexual la platicariamos para siempre hablarnos con la verdad. Ella se volvió a mi abrazandome y diciendome que era a todo dar, porque comprendía la calentura de su panocha y lo ganosa y jugosa que andaba de tener la verga adentro, y no solo la mia, sino de todos los que quisieran metersela. Nos dispusimos cenar y nos fuimos a la cama, donde cogimos como locos, mi vieja se puso en varias posiciones y me decia con mucha cachondez que me la cogiera rico, que en dos días iba ser testigo de como la picarían otras cuatro vergas y que ella estaba ansiosa de sacarles hastaa la última gota de leche.
El viernes a mitad del día Ramón comentó que la reunión se haría en casa de Raúl, que el iria por los vinos, mientras Manuel y Enrique pasaarían por la comida, y que sino tenía inconveniente, que a las tras de la tarde esperara a Carolina y que yo la llevará a la casa de Raúl. Le dije que no había problema. A las tres y cuarto de la tarde la esperaba en el estacionamiento a Carolina, mi señora, cuando se subio al carro, me dijo vamos rapido a casa, que me quiero cambiar y tomar unos accesorios que me compre para llegar lista a casa de Raúl. Me encamine a casa, me dijo que no me bajara del auto que no tardaba. Y efectivamente no tardo, se puso un vestidito que dejaba ver la mitad de sus chichotas y apenas le tapaba las nalgas y panocha, cuando se subio me di cuenta que se habia quitado los calzones, se veia muy sabrosa, iba muy metido en mis pensamientos cuando ella me dijo, que como se veia, le conteste que se veía riquisima, que se veía muy putona, que al más santo le para la verga, ella contestó: es lo que quiero, pararles la verga, para que luego me la metan. Diciendo esto se abrio de patas, y sobandose su rajada balbuceo, mira la panocha de tu vieja, le van a enterrar varias vergotas, mira como me escurre, tocala, siente la papaya de tu vieja, se la van a chingar, por cierto mira lo que me compre: me enseño unas bolas chinas moraditas, que inmediatamente empezó a meterlas en su ano, hasta tragarselas todas, solo quedo fuera un pequeño hilo para jalarlas, y también enseguida me enseño un vibrador electrico con forma de verga, que empezo a pasarlo por encima de su raja. Las patas las tenia bien abiertas, dejaba ver su panocha rasurada, se restregaba rico sus labios vaginales, y decia por culpa de mi rajada tienes una mujer muy puta, le encanta la verga, siempre me hace pensar e imaginar como se les va parando su camote y cuando ya lo tienen bien tieso, como lo apuntan a la entrada de mi raja, y sentir como me la entierran, y la meten y la sacan hasta que empiezam a aventar borbotones de leche.
Papi meteme un dedito en mi panocha, quiero que la sientas como esta cerradita y apretadita, y cuando regresemos a casa va a llegar bien cochina, escurriendo mecos de otras vergotas. Cuendo no dimos cuenta, ya estabamos frente a la casa de Raúl, esta vez me pidio que no la vendara, que queria verlos y saludarlos y no queria perderse detalle, y que yo tampoco lo hiciera, para que viera como se cogian a mi señora, y sobre todo como me ponia los cuernos.
Cuando entramos, ya la esperaban desnudos con las vergas bien paradas y tiesas, mi vieja entró contoneando sus ricas nalgas se bajo ligeramente su vestido y saltaron su par de tetotas, que en forma amenazadora reto a los asistentes, en eso vi claramente como se pusieron más tiesas sus vergotas de mis cuates. Ella movio muy puta sus nalgotas y agachandose les enseñó su papayota jugosa por las ganas de que se la cogieran, se voló al anfitrión a Raúl y agarrandole la verga la acomodó en la entrda de su pucha, dandose un sentón, engullendose sus pitote y dandose dos sentones se la saco y se volvió a Manuel, quien dirigiendose de frente le entregó sus tetotas y sentandose en su verga le dejo medio mamar sus chichotas, luego se volvió a Enrique agachandose le empezo a mamar la verga y friccionarsela con sus manos, luego se volvió a Ramón empinandose le ofreció todas sus nalgotas que dejaban ver la abertura de su panocha, no perdió instante para apuntarle su pitote y de una estocada se la enterró, y la agarró de sus caderas y empezó a bombearla fuertemente, ella gimoteaba cogeme así, hazme más puta, quiero ponerle bien los cuernos al cabrón de mi marido, mi putona estaba bien empinada, y pedía a gritos más verga, que queria sentirse bien usada, bien puta, yo veía como entraba y salía la vergota de Ramón, en eso mi vieja me dijo oye Alejandro acercate, dame tu verga quiero mamarla, era tal la lujuría de la putota de mi vieja que como a los cinco minutos nos estaba deslechando. Enseguida nos cambiaron, Manuel, Enrique y Raúl. Manuel se sentó en una silla medio resbalado para que mi vieja viera su vergota y montándose en él, se la engulló por su panocha, enseguida se acercó Enrique que apuntando su ariete al ojete de mi vieja se la dejo ir, mientras Raúl se la metió en la boca, la tenian pujando y gimiendo que se la estaban cogiendo bien rico, y pidiendo que la hicieran más puta, porque queria ponerle los cuernos a su marido. Estuvimos cogiendo como unas cuatro horas, donde disfrutamos a la putona de mi señora en todas las posiciones, la llenamos de leche, sus agujeros escupian los mecos de cinco vergotas. Nos tomamos algunas copas, nos dispusimos a cenar, y ya para despedirnos nos echmos como dicen la del estribo y un ultimo palito, quien gustosa y caliente, nos volvio a dar las nalgas la putona de mi vieja, con el pretexto de ponerle bien los cuernos a su marido. No me quedo la menor duda que me habia requete puesto los cuernos, peor que un reno quede. Mientras mi vieja quedo guanga y aguada por la cogidota que le dimos. Ya para despedinos Raúl ofreció llevar a mi vieja, quien después me platicó que en el camino se la mamó, y se le puso bien tiesa, y orillando el vehiculo en una parte oscura, todavía alcanzo a cogersela con las patas bien abiertas, aventandole el resto de sus mecos en su panocha.
Cuando llegó mi vieja se fue derechito a la cama donde la esperaba, y me dijo en forma muy melosa, tu vieja viene de coger, chupale la panocha para que saborees los mecos de los cabrones que me cogieron. En forma muy morbosa le abri las piernotas a mi señora y pude epreciar como escurrían hilillos se semen de su ano y su pucha, le estuve chupando sus liquidos mezclados y puse sus patas al hombro y me la cogí para rematar la jornada de ese día.
Con el tiempo se enteraron que Carolina era mi esposa, y que era muy compartido con los amigos y con aquellos que mi vieja quiere atender para sacarles hasta la ultima gota de mecos.
Afortunadamente no tenemos hijos todavía, porque sino no sabría de quien serían hijos, por las vergas que se han picado a la puta de mi vieja.
Antes de quedarnos dormidos, mi vieja me susurro al oído las gracias por permitirle satisfacer sus instintos y deseos de verga, y comprenderla que cada día es más puta por la culpa de su caliente panocha.
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Detalles
jupiter
Nombre do Relato
CUERNOS CONSENTIDOS POR NUESTRA LIBERALIDAD SEXUAL
Codigo do Relato
5281
Categoria
Cuerno
Fecha Envio
08/ago/2015
Votos
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