El cornudo de mi marido ha tenido la culpa que cada día sea más adicta a la verga, la quiero sentir en todos mis agujeros, que me la metan, que se las sobe hasta ver como escupen el semen de los huevotes del cabrón que este disfrutando mis nalgas.
Al principio vestía en forma muy recatada, mi ropa era holgada que se disimulaban perfectamente mis tetotas 36 C y mis exhuberantes nalgas, mis piernotas, pasaba completamente desapercibida, pero mi maridito me empezo a decir que si me ponía ropa más entallada se podían ver muy bien mis tetotas y se dibujaban en forma excitante mis nalgas bien paraditas, y que eso lo excitaba mucho y le daban ganas de poseerme con la verga más tiesa y dura. Al principio sentía pena y vergüenza, pero con tal de complacerlo y de que no se fijara en otras mujeres, me empece a vestir en forma muy provocativa. Cuando saliamos a la calle a caminar o ir de compras, todos los hombres volteaban a ver mis tetas y nalgas, me encueraban con su mirada y podía adivinar, como me imaginaban encuerada y a punto de cogerme con sus vergotas.
Tiempo despúes mi maridito me dijo, te verias mucho más rica si salimos a la calle pero no te pones brasier, ni calzones, y te pones esos vestidos escotados y vaporosos que tienes, en donde se pueden contemplar tu cuerpecito rico que tienes, en principio le dije que me daba pena y vergüenza, pero con el fin de gustarle y que no anduviera viendo otras nalgas le complací, y salia a la calle sin calzones y sin brasier, los hombres volteaban a verme enloquecidos y podía percibir como se empezaba a abultar su pantalón porque les crecia muy rapido la verga de imaginarme completamente desnuda y con las patas abiertas para recibir sus vergas.
Muchas veces empece a salir sola con ese tipo de ropa y sin calzones, ni brasier, los hombres no perdían instante de acercarse y pedirme a los descarado las nalgas, me ofrecían sus vergas para enfriar mi culo, que la verdad desde que ando asi vestida, mi pucha siempre anda ganosa de tener una verga adentro, siempre la traigo escurriendo, ando caliente, y me encanta ver como los hombres se imaginan que me tienen ensartada, mientras sus viejas se encabronan y les dicen que no volteen a ver a una puta, resbalosa.
Pues Fermín no fue la excepción, el fue compañero mio en la preparatoria, y cuando me cruce en su camino sin reconocerme todavía, me dijo mamacita que rica estas, prestame tus tetotas para acabarme de criar, y tus nalgotas para que me sobes mi camote que nada más de verte, esta duro y tieso....En eso se dio cuenta que era su compañera de escuela, y me dijo perdoname lo aventado, pero insisto, te caes de buena y me has parado la verga con esas tetotas que están a punto de escaparse de tu vestido, y tus ricas nalgas se ven deliciosas, por lo que te pido me las prestes para enfriar mi verga, sería imperdonable que me dejaras con la verga hinchada y mis huevos llenos de leche sin poderlos vaciar, además se ve que debes coger riquísimo, déjame usar tu culo, déjame saborearlo. Ante los comentarios mi panocha termino de mojarse y me imaginaba esa verga que me ofrecía entrando y saliendo de mi culito, terminando por decirle que estaba bien que le prestaba mi cuerpecito para que lo disfrutara y que enfriara su calentura.
Enseguida te llame para avisarte que en un rato mas iban a usar a tu vieja, que se la iban a coger, que le iban a picar la panocha y la bañarian de mocos, estaba usando el permiso que me diste maridito de meterme otras vergas, que con tu consentimiento a tu señora le iban a abrir las patas y le enterrarían otra vergota hasta enfriarla y sacarle todo el semen, colgandote.
Fermín me dijo que su carro estaba en el estacionamiento y que le acompañara, cuando me subió al carro, se pudo dar cuenta que mi papaya iba completamente descubierta, no llevaba calzones, pudo ver mi raja completamente rasurada con un mechoncito nada más. Eso lo enardeció más y me dijo, tu saliste a buscar verga, como es posible que tu marido permita que salgas así a la calle, yo le conteste que tenía permiso tuyo de meterme otras vergas, el agregó no te creo, pero si es cierto lo que dices cuando te este cogiendo le marcas a tu maridito para decirle que se están cogiendo a la puta de su vieja.
Cuando me acomode en el asiento del copiloto mi vestido se subió dejando ver mi rajada toda depilada, el empezó a meterme mano, acariciando mi panocha me calentó aun más, me empezó a meter un dedo en mi raja, yo le abrí más las piernas para que no tuviera ningún problema en acariciarme, mi panocha escurría a borbotones de la calentura que traia, mientras mis tetas iban fuera del vestido bamboleandose. Llegamos al motel, me ayudo a bajar y también a desatar mi vestido el cual cayo dejándome completamente desnuda, solamente con miz zapatillas de tacón alto que llevaba, pudo contemplar a tu vieja en cada rincón y también pude percibir como se endureció más su rico pitote, estaba duro, tieso y venoso y además grandote y grueso, mi pucha ardía en deseos de sentir ese animalón picando mis entrañas.
El muy cabrón con mucha delicadeza me recosto en la cama, abrio mis piernas y me empezó a mamar la panocha y mi ano, y con sus manotas me restregaba las tetas, me tenía ardiendo de la calentadota que me estaba metiendo, luego me voleto y me puso de a perrito, y siguió mamandome la rajada y el ano, estaba calientisima, que le dije: no seas cabrón ya damela, meteme tu verga, quiero sentirte, dejame sobartela. Con mucho gusto te voy a coger como me lo pides, pero antes dale unas mamaditas a mi verga, quiero sentir tu boquita y labios como tratan a mi verga. Enseguida me acomode y le empece a sobar su vergota con mis manos, su verga se irguió más tiesa, le empece a pasar la lengua desde la cabeza hasta los huevos y le dije se ve que la tienes riquisima, ya quiero tenerla en mi panocha, el me dijo la vas a tener a tu disposición, pero antes llamale a tu maridito y dile donde estas, quiero escuchar que tienes permiso de tu marido para meterte otras vergas.
Enseguida te llame maridito cornudo, y te dije que iban a usar las nalgas de tu vieja con tu permiso, me dijiste que te llevara pruebas, y no solo te llevare pruebas, sino que te digo en este momento me tienen con las patas levantadas y mi pucha escurriendo, están a punto de meterle la verga a la putota de tu señora, voy a llegar a casa bien cogida, guanga y escurriendo de leche para tí papi.
Puso abajo de mis nalgas una almohada para levantar más mi rajada, acomodo su vergota y pense que me la meteria de una estocada, pero el muy cabrón empezó a tallarla en mi rajada, yo queria sentirla, pero siguió tallando mi papaya, en un descuido, me safe, y lo puse boca arriba, me le trepe, y acomodando su fierrote en la entrada de mi rajada, me di un sentón, engullendome todo su pitote en mi panocha, senti como entraba ese camotote, que me hizo suspirar y decirle no solo se ve que lo tienes riquisimo tu pitote, esta riqusisimo, empece a cavalgar, a subir y bajar, mis nalgas se abrian para que mi papayota recibiera enterita esa vergota, el me grito, eres una super hembra, eres muy putona, coges divino, tienes un culo delicioso, que rico te la tragas, cuando empezó aventarme ese liquido caliente, estaba vaciando sus huevotes, la leche inundo toda mi pucha.
Empezó a bajarsele lo duro y tiesa, enseguida me acomode para mamarsela y saborear parte de los mocos que todavia seguia escupiendo su verga, se puso tiesa otra vez, y el me mamaba la pucha y el ano, metiendome su lengua en mi ano, me dijo se ve que también lo tienes riquisimo, me dejas probarlo, yo le conteste, haz de mi lo que quieras, quiero que quedes completamente satisfecho y no andes diciendo que por culpa de mis tetas andas con la verga parada. Lo que hagan mis chichis, mi culo responde, acomodándome de a perrito, apunto su camote en la entrada de mi culo, de un empujoncito la cabeza de su chile estaba entrando en mi ano, y en un movimiento más entró todo su camotote, el cual saboreaba, estaba delicioso, empezó a taladrarme con mucha fuerza, que me hizo gritar como una puta consumada, le dije, sigue así, cogeme rico, quiero ser tu puta, cuantas veces quieras, cuantas veces tengas la verga tiesa, aqui tienes nalgas listas para atenderte, para sobar tu rica verga. SU animalón entraba y salía, jadeabamos como animales en brama, se empezó a venir nuevamente, mis entrañas estaban recibiendo otra descarga más de esos huevotes, sentí como inundaba mi culito, eran borbotones de leche que estaba recibiendo la putona de tu señora. Me cogio con todas sus ganas, me alcanzo a hechar cuatro palotes, mis agujeros estaban bien atendidos, cerca de las once de la noche me acomode mi vestido, y me llevó a casa, tu me esperabas con ansiedad, alcance a ver que estabas en la ventana cuando yo descendía del carro de Fermín.
Entre a casa y subiendo a la recamara, vi que te estabas agarrando y masajeando tu verga, y me dijiste como te fue, te comentó, re bien, vengo bien cogida de todos mis agujeros, mi compañero Fermín tiene una vergota riquisima, se la mame, se la sobe con mi boca, mi lengua, mis manos, mi pucha y culo entraron en acción para enfriarle su verga, mira quiero que veas como huelo a macho, y vengo escurriendo de mocos de otra vergota que tuve que atender, por culpa de mis tetas, porque me dijo que son las culpables de haberle parado la verga, y mis nalgas hoy, cumplen todas las provocaciones y paradas de verga que hacen mis tetas. Enseguida te agachaste y me empezaste a mamar mi pucha, y te diste cuenta como salia de mi ano y pucha hilillos de mocos de la verga que atendí.
Maridito mio, no te vayas a encabronar, pero tu me enseñaste a andar de putona, así que ahora te chingas, cuantas veces llegue escurriendo de leche, tendras que mamarme la panocha, y pasar tu lengua con delicadeza en mi panocha y ano, y bueno con derecho a rematar mi calentura, enterrándome tu verga, para que también puedas echarme tus mocos, en esta ardiente y caliente señora que hiciste, para saborear y disfrutar cuanta verga me ofrezcan o que quieran usar a tu vieja. Puta me hiciste, puta me aguantas, y me vale que tus cuernos te crezcan. Además te confieso, me encanta que los hombres me vean mis tetotas y mis nalgas en los vestidos transparentes que uso, el morbo me provoca que mi panocha ande ardiente y ganosa.
Así que cuando vean a una señora riquisima y buenota, que se le ven sus nalgotas sin calzones o sus tetotas sin brasier a punto de salirse del vestido, es la putona de mi vieja, que quiere enfriar tu verga, si es que nota que te paró. Ella se mortifica mucho de dejar alguna sin atender y se acercará a tí para decirte que no debes andar con la verga tiesa, porque te puede dar dolor de huevos. Ella gustosa te ofrecera que puedes usar su culo y mamar sus tetas para enfriarte.
La verdad, mi vieja es muy cachonda y caliente, que luego pienso que mi verga es insuficiente para enfriarla. Es necesario que tenga disponibles otras vergas para enfriarla.