Entregué el almuerzo y pasé por los baños antes de regresar a casa, me llamó la atención lo bien limpios y cuidados que estaban además con sólo luz natural, por alguna razón voy a orinar a la parte de atrás que está más oscura y escondida y encontré un grupo de seis hombres que se estaban besando, manoseando y pajeándo, yo me volví excitado por lo que estaba viendo, pues fantaseaba y deseaba hacer algo con un hombre y estos eran varios bien atractivos además con penes bien grandes y parados, mientras todos me miraban sorprendidos, hasta que uno muy guapo vino hacia mí, me tomó de la mano, me besó, acarició mi cintura y con palabras morbosas me invitó al grupo!
Ahí me besaron y acariciaron uno por uno dándome la bienvenida invitándome a disfrutar con ellos, me sentí feliz en su compañía, de repente sentí el aroma indescriptible de machos de todos ellos, era embriagante! Me dieron sus vergas a tocar y jalar. Me encantó agarrárselas mientras ellos acariciaron mis nalgas que se me pusieron duras y temblorosas.
Te gustan nuestras vergas, me preguntaron y emocionado les dije que si! Ponte de rodillas nené, así lo hice y comencé a sobar dos vergas y saborear una tercera! Que emoción sentí lamiendo aquella verga, su capullo y probando su presemen! Mientras jalaba las dos vergas con manos temblorosas que casi no alcanzaban darle la vuélalas a esos troncos tiesos corriéndoles el prepucio! Mis ojos desorbitados trataban de abarcar mis tres actividades simultaneas! Mi olfato se llenaba de su olor masculino.
Uno de ellos también me bajó el pantalón y comenzó a dedearme el culo y burlarse de mi pichulita excitada y mis bolitas lampiñas, excitandome aún más.Recuerdo que otro me tomó del cuello y me metió todo su pito delicioso en la boca, lo que hizo que me ahogara y no poder respirar, pero no me soltaba aunque yo intentaba empujar. Al final acabó dentro de mi boca, tragué su semen, me felicitó diciéndome que era un putico muy bueno y se fue.
Luego otro de ellos me llevó a un cubículo para estar solo conmigo y me puso a mamar su verga mientras el resto de los hombres me veía con lujuria, el tenía su pito muy grande y grueso. Me fue guiando como hacerlo con mis labios, sin usar mis dientes y a masajear la cabecita rosada de su pene con la lengua saboreando su presemen, ya que nunca lo había echo.
Aprendí a maamarsela bien a su gusto y el gusto mío también. De repente sentí su verga pulsar y comenzó a llenarme de semen cremoso la boca, saboreala nené y tragatela! Así lo hice y me felicitó! Después vinieron los demás uno a uno e hice lo mismo! Mamando y tragando su leche fresca cremosa! Unos se quedaban a ver y otros se iban hasta que quede yo solo con uno que me jaló mi pichulita babeante de presemen, me la chupó, eyaculé en su boca golosa, nos besamos con los labios cremosos y nos fuimos a lavar las manos y la boca!
Desde ese momento comencé a frecuentar bastante esos baños, además de hablar con hombres por redes sociales y mostrarles mi cuerpo desnudo o con lencería de mi hermana que me incitaban a poner para hacerme más atractivo y citarnos para encuentros excitantes que me dejaban con las ganas de repetir!
¡Ay esos baños públicos! que grandes cogidas me dieron en esos lugares, todas las ciudades del mundo deberían estar llenas de aseos públicos. Entrar en ellos y que veas como hombres desconocidos te miran, como se te acercan, como te empiezan a meter mano y así que ven que los dejas, te llevan de la mano para uno de los cubículos y allí te quitan la ropa y hacen suyo, te abren de piernas y te enculan bien enculado, gimes y chillas de gusto. Luego sales todo colorado, llevas dentro tuya el semen del macho que te acaba de preñar.