En esta ocasión les relataré de una excitante experiencia que disfruté el fin de año. Todo empezó con una llamada telefónica de mi novia invitándome a comer y después a ir de compras. Sé que cuando me dice "ir de compras" es porque tiene pensado comprarme esa ropita sexy que me hace lucir esas redonditas nalgas que dice que tengo y que le gusta que se las luzca bien paraditas. Acordamos la hora y el lugar y después de comer me llevó a la tienda especial de prendas femeninas sexys y, como si fuera ella la interesada en las prendas me las mostraba diciéndome qué me parecía ésta o aquella. Me mostró un trajecito de colegiala, faldita corta de color rojo, liguero y medias del mismo color, blusa blanca con corbata que bien sabía ella es algo que quería lucir, imaginarme ser una colegiala dulce e inocente dispuesta a perder la "virginidad". Le guiñé el ojo en aprobación de ese conjunto, después de pagarlo nos dirigimos a un hotel cercano ya que estaba deseosa de ponerme la nueva prenda para sentirme hembra y muy sexy.
Durante el trayecto no pude disimular mi excitación con mi novia, mis pezones se endurecieron de solo imaginarme cómo me vería con mi nueva adquisición, al darse cuenta ella me dijo: "tranquila, nena, tranquila ya falta poco para que me luzcas esas ricas nalgas de puta que tienes"... Le dirigí una sonrisa y le dí un pequeño beso en la boca.
Al entrar a la habitación no resistí más y abrí el paquete con desesperación, coloqué cada prenda en la cama y le dí las gracias a mi novia por el regalo. Ella me dijo: "Es tu regalo de fin de año... sé que es algo que has querdido desde hace tiempo y ahora es momento de que te conviertas en esa dulce e inocente colegiala". Yo le contesté: "pero mi amor hará falta el maquillaje, ¿no crees?". A lo que ella respondió: "No te preocupes, vine preparada para todo, anda ve a ponerte esa ropita para que la luzcas para mí". Acudí al baño a cambiarme, no podía ocultar la emoción y el nerviosismo de cómo me vería vestida de colegiala.
Terminé de vestirme y salí al encuentro con mi novia y me dijo: "ven, siéntate aqui, debo maquillarte para que te veas linda". A partir de ese momento sentía increíbles sensaciones al verme en el espejo y ver poco a poco cómo iba ocurriendo la transformación de mi persona hasta convertirme en una hembrita dulce e inocente vestida de colegiala.
Al terminar de maquillarme mi novia me dijo: "Anda... ya eres una hembrita camina y luce tu figura para mi". Caminé como si fuera modelo en una pasarela a lo que ella exclamó: "wowwww... qué rico te mueves, amor".
Me acerqué a ella y nos dimos un profundo beso me acarició el rostro, me besó las mejillas y me giró lentamente para quedar abrazada de ella dándole la espalda, me tomó de las caderas y luego de los senos y se dió cuenta de lo duro que tenía ya los pezones, me besó el cuello y con voz susurrante me decía al oído: "que rica putita eres... te ves tan sexy y tan nalgona que quiero cogerte ya". Me condujo a la cama y sin que me lo pidiera me arrodillé en la orilla de la cama de manera que pudiera lucir mis nalgas con esa faldita corta que tenía puesta. Al verme así me dijo: "Mi amor, quédate así, dejame admirarte como te ves ahí. Cerré los ojos disfrutando de ese momento de excitación por lo que no me dí cuenta que mi novia se dirigió a su bolsa que ella traía, sólo escuché el ruido de algo que había sacado de ella. Se acercó y me dijo: "quiero que sigas con los ojos cerrados y me digas qué estás sintiendo... ok?"
Sentí sus manos acariciándome las nalgas al mismo tiempo que decía: mmmmm... estas nalgas que tienes están riquísimas amor... en verdad pareces una hembra bien nalgona... aprobé el comentario parando más las nalgas esperando que me quitara la tanga que llevaba puesta. "Sí... sí... sé que quieres que te quite la tanga para que te vea ese rico culo de puta que tienes.. pero ten calma... tengo algo para ti". Lo que ella había sacado de su bolsa era un enorme pene de plástico que yo no conocía y no me lo mostró para que fuera una sorpresa. "Déjame quitarte la tanga porque quiero que me enseñes que tan grande puedes abrir ese culo". Sin darme cuenta de sus intenciones, me quitó la tanga y tomé con mis manos mis nalgas para poder abrir el culo y mostrarle a mi novia lo que me pedía. Al hacerlo me dijo: "Ay mamitaaa..! tienes un culo de puta que está ardiendo por tener una verga dentro de él"... lancé un gemido de aprobación y en ese momento empecé a sentir algo duro y frío rondando mi culito. ¿Qué es amor?" le pregunté: A lo que ella contestó: "Algo que te hará gemir como la puta que eres y que siempre has deseado tener". Ahhhhh... lancé un alarido de placer al sentir el roce de esa herramienta tocando la entrada de mi orificio... mmmmm... así.. así... ahhhhh... abrí más las nalgas con mis manos esperando recibir esa verga que aún no sabía de su magnitud. Mi novia hábilmente empezó a explorar con ese juguetito mis partes más sensibles de mi trasero... empecé a moverme lentamente de atrás hacia adelante como invitando a mi novia a que introdujera de una buena vez esa cosa que me estaba volviendo loca de deseo. "¿Te gusta este otro regalito, amor?" me dijo ella, a lo que respondí: Pero mi amor... ni siquiera lo he visto. "Es que no quería que lo vieras... solamente lo sintieras y me dijeras que tan puta te sientes teniéndolo adentro de tu culo". Ahhhhh... sí..! le respondí... anda ya... quiero sentir que tan profundo puede entrar.. mmmmm... "pero le faltará lubricante amor, y eso no traje.. ¿así quieres que te lo meta?". Este... este.. bueno... no sé... la verdad como no lo he visto no sé que tan grande sea y no quiero lastimarme, ¿me comprendes?. "Y si... bueno... como no quiero que lo veas... ¿que te parece si te cubro los ojos con la corbata del trajecito y le das unas mamadas a la verga y la lubricas? así te darás cuenta de qué tan grande es.."
Sí amor... hagamos eso. Me cubrió los ojos y me acercó a la boca esa verga que no me dejaba ver empecé a succionar y chupar esa verga y pude darme cuenta de que era de dimensiones considerables... pero al pensar de que pronto la tendría en mi culito la empecé a mamar y mamar dejandola bien lubricada para que mi novia intentara meterla de una buena vez. "Ya chiquita ya... le estás dando unas mamadas a esa verga que de seguir así le vas a sacar toda la leche"... jajajaja.. reímos al mismo tiempo.
"Ahora sí... preparate... esta verga te tocará lo más profundo".
Abrí más las nalgas y el culo se abrió como si fuera una flor y el contacto con ese enorme miembro hizo que exclamara fuertemente... ahhhhh... ahhhhh... siiii..! asi.! mmmmmm... qué rica verga amor... mmmmm.... "Apenas tienes la puntita, amor.. espera a que te entre un poco más"... Sentía como ese miembro abría mis entrañas y el placer era intenso disfrutaba doblemente por tener esa verga en mi culito y por tener esa ropita que me hacía sentir bien puta y bien caliente. "Anda puta, así.. cómete esta verga que te está dando placer". "Abre bien el culo y gime como la puta que eres". "Que ricas nalgotas de puta tienes y ver como te entra y sale la verga y escucharte gemir te hace ver bien cachonda". Yo sentía mucho placer y no recuerdo qué más me decía mi novia en esos momentos... yo quería más, más y más... y le decía a mi novia... "hazme tu puta amor... dame más de esa verga que me tiene loca de pasión... quiero que me veas y sientas que tan puta puedo sentirme cuando me tienes así"...
No pude contener más mi satisfacción de esta nueva experiencia y derramé mi leche en la cama... exhalando un suspiro de mucha complacencia...
Después de un breve descanso comente con mi novia de esa nueva experiencia... Pero eso no terminó ahí..
(Se los platicaré en el próximo relato)