Durante un puente festivo largo en que yo debia de trabajar, mi esposa se fue de viaje con tres amigas (luego me conto que las cuatro estuvieron follandose a todo el que se ponia a tiro), llegue a mi casa ya vacia, cansado y sudado, me quite la ropa y andaba yo en calzones, cuando sin llamar la vieja entro por la puerta, pense que al verme desnudo se marcharia, pero se acerco a mi y me pregunto:
-¿A pasado algo? he visto subir al coche de sus amigas a tu mujer con una maleta,-añadio- que bien hueles, me gusta el olor a macho sudado.
-Nos hemos separado.- Menti
-Que pena, haciais muy buena pareja -se lamento-¿puedo ayudarte?, ¿quieres que te haga la comida?.
-Ya he almorzado- intente ser desagradable para que se marchara-, pero podria hacerme una comida de polla.
-Nunca lo he hecho- contesto-, pero lo intentare.
Se acerco, saco mi pija y la muy cerda, se la metio sudada en la boca, que placer, aquella boca sin dientes suplia con creces la falta de experiencia, le cogi la cabeza e hice que tragara hasta la garganta, no le avise y me corri en su boca, no pudo tragar toda la leche y dejo caer un poco sobre mis huevos, le ordene que me los limpiara con la lengua y lo hizo hasta que los cojones quedaron limpios.
Fui a ducharme, le dije que viniera a enjabonarme la espalda, se desnudo y en pelotas ganaba atractivo, si bien la cara era arrugada, el cuerpo se mantenia terso, las tetas al no haber amamantado, aunque algo caidas, aun estaban llenas de carne. Me enjabono y me lavo todo el cuerpo, como agradecimiento yo le pajeaba su chocho sin pelo, se corrio y me confeso que era la primera vez de su vida que habia notado algo parecido, la hice sentar sobre la taza del inodoro, y paso a paso le enseñe a mastrubarse, la deje sola y mientras me vestia escuchaba sus gritos de placer, cuando salio agotada le confese que mi esposa estba de vacaciones que no nos habiamos separado.
Se marcho alegre dejandome una copia de sus llaves "por si necesitaba de ella para algo".
Tenia pensado aslir por la noche a ver si ligaba, pues estaba seguro que mi mujer follaria todo lo que pudiera, me acorde de la vieja desnuda y fui a visitarla. La encontre tumabada en el sofa pajeandose, me arodille asu lado y me puse a chupar sus tetas, cuando solto su zumo puse mi cabeza entre sus muslos y con la lengua limpie su chocho pelon, segui lamiendo la raja, haciendo espiral, meti la lengua en su cueva y cuando note que volvia a correrse sorbi su pepita, solto mucha cantidad de jugo mientras tenia convulsiones, segui sorbiendo hasta que se calmo. Yo seguia de rodillas y mi tranca empinada quedaba a la altura de su coño abierto, tome sus piernas las puse sobre mis hombros y le meti el cipote de un golpe, gritó, y me pidio que la destrozara, meti y saque con energia y volvio a correrse, segui con el mete-saca hasta que me vacie dentor de ella, al notar mi leche, la vieja volvio a correrse. Quedo exhausta, incapaz de ponerse de pie, la cogi en brazos y la lleve a su cama, cuando me despedi, me lanzo un beso dandome las gracias por haberla hecho sentir una hembra.