SEXO PUBLICO EN GOMORRA...
( Relatos Dominacion )
La siguiente es una narración de mi visita a Gomorra, un centro de encuentro alternativo tipo sauna en la ciudad de Barcelona.
Curioso como soy, investigué por Internet de este sitio. Días antes caminé por la calle semi oscura y pegada al dudoso hotel de esta zona. Veía caminar hombres solitarios rumbo a este lugar y a otros salir.
Finalmente me decidí a entrar, vestido casualmente aunque semi provocativo por ser vanidoso y creer que habría alguien a quien le gustara.
Error nadie me vio.
Mis planes eran que saliendo de un concierto me cambiaría de ropa con la idea firme de de ir a este lugar.
La excitación era inmensa y quería saber aún más de este “nuevo” inframundo homosexual que tanto me había atraído y donde finalmente me habían “iniciado” mis dos amigos españoles que según decían, mis tendencias eran totalmente claras, pero yo las había negado por mucho tiempo.
Tenían razón!!!
Me puse un abrigo largo que me cubría lo suficiente para pasar inadvertido, pagué mis 25 euros y me aventuré a entrar a este sitio supuestamente consagrado a la lujuria, el sexo y la promiscuidad.
Temía ser visto y sobre todo reconocido, así que decidí aventurarme aún vestido a conocer los famosos laberintos y saunas.
En la penumbra, entré al primer piso familiarizándome con el mencionado laberinto. De pronto me encontré en medio de cuerpos desnudos que otros cuerpos follaban.
Machos desnudos mostrando sus nalgas, sus cuerpos…su sexo. Era un escenario porno en vivo, me sentí como en tantos videos que había visto.
Yo, aún vestido sentí una mano que me invitaba a entregarme a la oscuridad, pero por temor, la rechacé. Bajé las escaleras y un tipo guapo y varonil, supongo el encargado del lugar, me llamó la atención invitándome a desnudarme porque estaba prohibido entrar vestido, y seductoramente me conminó a quitarme todo.
Tomándome de la mano bajamos las escaleras y me mostró los vestidores donde me quité y guardé mi ropa; ya desnudo, tomé decidido el lubricante y los condones que ya traía preparados y entonces si, me aventuré a conocer el lugar, tratando de evitar ver caras por si alguna era conocida.
Busqué afanosamente ese columpio donde he fantaseado que me follen sin piedad abierto de piernas y finalmente lo encontré en la planta baja, Para mi fortuna estaba vacío…inmediatamente me vi tirado en él, vestido en chaps de cuero mientras un hombre fuerte y rudo estaba metiendo y sacando su miembro perforado por una gruesa argolla, que me producía ese dolor y placer que se hermanan en el sexo duro entre hombres que disfrutan el S&M…
Volví a la realidad y me aventuré en el laberinto que había visto antes.
Algunas parejas teniendo sexo fue lo primero que encontré, me acerqué a la cama curioso y contemplé su accionar, entonces ahí en un rincón y en medio de 3 personas, un tipo maduro me empezó a manosear, me tomó de los pechos y sentí su verga dura entre mis nalgas…rico, placentero. De pronto y de un fuerte empellón, me tiró sobre la cama y ahí, en medio de toda la gente a la que yo había contemplado antes, se montó encima de mí y me penetró…dolor que de pronto empecé a disfrutar…
Me gusta que estén sobre de mi pensé y entonces empecé a sentir sus caricias de hombre maduro, esos que saben lo que quieren y como lo quieren. Su pene grande, duro, grueso. Yo sabía que un hombre maduro se va más a lo romántico y generalmente besan bien, sin dudas.
Entonces llegó un macho también ya maduro, de buen cuerpo, rasurada la cabeza, velludo, moreno, chaparreras de cuero gastado, testigo de innumerables batallas sexuales; se abrió de piernas y vi entonces como otros tomaban turnos y lo empezaron a penetrar…Él al lado mío.
El pequeño cuarto impregnado de olores a sudor, cuerpos, semen sexo…
Más personas viendo y yo a lado, excitado al máximo, entonces lo empecé a acariciar mientras varios lo follaban, lo usaban, lo abusaban…él respondió mis caricias y nos besamos. Sin pensarlo tomé su polla y empecé a masturbarle.
Su polla, que al principio era blanda, endureció su grosor era impresionante, vi sus piernas y me di cuenta de lo fuertes que eran, el cuerpo velludo lo hacía machuno, hombre casi perfecto pero eso si, me di cuenta que al hablar le gustaba que dijeran que era muy “puta”, entonces él, dejándose follar boca arriba, le pidió a mi amante en turno que sobre de mi, me cojía mas y mas fuerte que cambiáramos pareja…
Pero él –mi amante en turno- empezó a celarme, solo me quería para él y en lugar de compartirme me fue distanciando.
La verdad, si hubiese querido el intercambio de pareja pero no, mi amante NO lo permitió y comprendí que estaba en el lugar equivocado. Entonces delicadamente me quité de la cama para no molestarle y entonces el hombre que montaba al pelón, me preguntó: te lo quieres coger? Le dije que no, me equivoqué porque en ese momento se sintió humillado y me dijo: una puta como tú, no tiene decisión y menos mientras se la cojen públicamente; para entonces ya el lugar encajaba mas en lo que tenía en mente, el hombre maduro se fue al ver que ya no le hacía yo caso y llegó otro, pequeñín pero musculoso, me empezó a acariciar, igual, me puso de nuevo su polla en las nalgas y sin pensarlo mucho ni el condón se puso y me empezó a follar a pelo en posición de perro, desnudo y frente a todo mundo pensé, ahora si inició el show y yo soy la estrella.…
Me abrió fuertemente las nalgas y empezó a penetrarme lentamente; como siempre, primero dolor y entonces poco a poco tomó su ritmo y el placer renació.
Era tarde, la gente empezó a irse solo quedó un público de unas 5 personas viendo a lo lejos, me di cuenta que ellos mejor andan de putas en los cuartos oscuros esperando encontrar a su alma gemela…cada quien su vida.
En fin, fue una experiencia increíble eso de que me vieran tantos mientras me follaban y usaban, era lo más excitante que me había pasado hasta entonces…
Aunque me folló el pequeñajo sin condón y con su hermosa polla me satisfizo como hasta ese día nadie lo había hecho y aunque fué muy amable y sensual, me di cuenta que a fin de cuentas me uso y me quedé ahí, feliz, usado, cojido, excitado y exhibido sobre la cama…ya casi todos se habían ido…bajé desnudo y satisfecho a ducharme el semen corría ya por mis muslos, algunos hombres viéndome sonreían, otros platicando en el lobby.
Me llamó la atención un hombre alto de hermosa figura que se follaba inmisericorde a un jovencito con cuerpo de nadador en un rincón…El pequeñín gemía de placer mientras el guapo la metía y sacaba lentamente y juego acelerando el paso. Me di cuenta que otro hombre, también guapo y musculoso esperaba su turno viendo como el bello jovencito era fácilmente puesto en distintas posiciones, algo que me pareció muy pero muy sensual.
Eso era lo que esperaría la próxima vez!!!
Gomorra es un lugar fascinante, guarro, caro, interesante que coquetea -un poco- con el mundo del S&M sin llegar a serlo; pero sí, es un sitio realmente lujurioso y alternativo, exacto lo que esperaba.
Misha.
Comentarios
Wow Misha, que experiencia mas emocionante, por aqui no conozco nada asi, me encantaria conocer un sitio como este porque me imagine ser tu en el relato! Besos de Maiquita
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