Hace más de un año...
Un dia con mi mujer se nos antojo comprar un paquete de esas promociones que inluyen viaje a Miami con media pensión, coche y viaje a las "Bajamas".
Miami es una ciudad hermosa, moderna enclavada en el caribe, con gran historia y un entorno único, costas de naufragios y una de las puntas del triángulo de las Bermudas, tesoros piratas, huracanes y caimanes, ya mas cercano en el tiempo revolución cubana y Pablo Escobar.
Pero lo mas hermoso son sus costas y ese toque que le dan los latinos a una tierra de gringos.
Entusiasmados giramos el dinero sacamos el visado y nos fuimos a la Florida.Los primeros tres dias lo pasamos muy, muy bien.Veia como con curiosidad la gente se me acercaba me miraban fijo como para decir algo y luego se arrepentian, no le di importancia hasta que ya me entro a cansar y le pregunte al gerente del hotel.
-"¿Porque me mira la gente, tengo algo malo?"-, pregunte al hombre.
-"No Senor nada malo, sucede que usted tiene un parecido asombroso con el Senador Guzman Kerry, que se supone esta en DC"-, dijo el empleado.
No le di trascendencia en ese momento y bromee con mi mujer con la posibidad de ligar alguna cosita gratis suplantado la identidad del politico.
Siempre nos aventuramos en lugares publicos y donde hablarar espanol, pero un dia nos aventuramos a salir por la noche por nuestra cuenta.
Mi mujer ya rondaba los 40 pero se mantenia bien, se baño y me detuve a verla como se vestia en el dormitorio, dejo caer las toallas pude ver que estaba prolijamente depilada y como me gusta se habia rasurado enteramente su conchita, se puso crema todo a lo largo y ancho de su cuerpo, verla me provoco una ereccion, me puse mimoso y ella me dio un beso y me dijo -" Despues"-, siguio con su ritual de vestirse, escogio un biquini negro con un wonderbrass del mismo color, tomo un corto y vaporoso vestido negro, tacos altos y pinto sus labios de carmesi, ato su pelo en una coleta, tomo una carterita y dijo -"Pronta"-.
Me vesti de saco y corbata como para una cena formal, queria estar a la altura de la elegancia de mi mujer.
A las 23 hs salimos del hotel, vamos a una disco donde el portero nos deja entran sin cobrarnos, por aquello de la eterna confusion con el dichoso senador, nos reimos y entramos creyendonos vivos, aquello era alucinante y pudimos reconocer mas de una figura de Holliwood y de la musica latina.
Tres horas mas tarde salimos, asombrados, cansados y felices, caminamos unos 200m y un coche sedan oscuro con los vidrios tintados nos corta el paso, del vehiculo descienden dos tipos enormes de aspecto siniestro, nos apuntan con una Glock 9 mm cromada que destella brillos mortales, les doy a entender en un pesimo ingles que no tenemos dinero, a empujones nos obligan a subir a la parte trasera del coche donde hay otro tipo armado...era un secuestro.
Aterrados obedecemos, el coche es encendido y conducido durante una hora, hasta llegar a una gran mansion en las afueras de Miami.
Los portones se abren y entra el coche, luego a empujones nos obligan a bajar y entrar en la casa.Era una gran casa vieja, tal vez del siglo 19 pero excesivamente decorada, muy ostentosa.Aparece un individuo en silla de ruedas, era negro tal vez de unos 65 años, obeso, muy obeso por eso la silla, calvo, vestido con un traje blanco y con sus manos cubiertas de anillos.
Dos guardaespaldas lo ayudan a levantarse y acercarse a nosotros, me mira unos minutos sin decir palabra y luego explota de ira.Se dirige a nuestros raptores en ingles yo algo entiendo.
-"! Imbeciles, se han equivocado, este no es el antiguo Fiscal General hoy Senador, Guzman Kerry, no es el bastardo que mato a Fernando mi hermano y dejo pudrir 5 anos a mi hijo Pedro en una carcel federal."- , dijo el hombre.
Luego dirigiendose a mi me pregunta, -" ¿Quien diablos son ustedes que me han hecho perder mi valioso tiempo?"-.-.
Le contesto en espanol, el hombre escucha todo el relato y me responde en perfecto castellano.
-"Mi madre era de la Isla y huyo cuando Batista y ya no volvio", hace una pausa y ordena a sus sicarios -"Deshagance de ellos", los tipos blanden las armas, mi mujer se deshace en llanto y ruega por nuestras vidas, -"¡No nos mate por favor haremos cuaquier cosa que nos pida!”-.
-"Que pueden tener ustedes que yo quiera, lo tengo todo"-, dice el mafioso.
-"Hummmm...esperen", ordena a sus hombres que ya nos sacaban al enorme patio trasero.
El gordo mira a mi mujer, le ordena, -"Gira", luego, afirma, -"Te ves bien, pareces sana y limpia, tal vez no este todo perdido, si obedeces a todo, todo, les perdono la vida y les dejo en el primer avion que salga para su pais, soy un hombre comprensivo, podras gritar, quejarte pero no quiero un no de tus labios, si mis chicos quedan conformes y dicen que colaboraste ganaras tu derecho a vivir, sino..."-.
-"¿Si hago lo que me pide, que garantias tengo de que cumpla?"-, pregunta mi mujer convencida de que era un tema de drogas.
-"Mi palabra es suficiente"-, añade el hombre.
-"Mi venganza sobre el Senador iba a ser mi sorpresa para mi hijo Pedro, sale ahora en la manana de la carcel, Bruno mi hijo menor lo fue a buscar"-, agrega el sujeto.
Luego mira a sus secuaces y les dice en Ingles, -”! No quiero que Pedro se descargue con Clarita!”-, los tipos rien de manera perversa.
Luego nos encierra en un dormitorio en la planta alta de la casa, un dormitorio muy grande estilo colonial, con una gran cama de dos plazas y media, temblando esperamos los acontecimientos.
Pasaron horas…
La puerta se abre, entra el gordo y dos guardaespaldas, rapidamente me sujetan y atan a la silla, una mordaza y una capucha, no puedo ver nada, oigo los ruegos de ella.
-“! Por favor no lo lastimen ¡ “-, ruega ella.
-“Ya están llegando mis hijos, cierra la boca, si colaboran no les pasará nada “-, aclaró el mafioso.
Cinco minutos mas tarde…
Se abre la puerta, escucho risas y saludos, mezclas de expresiones hispanas y yanquees.
-“Pedro, Bruno les tengo una sorpresa, mira a quien te hemos traido con esta señorita”-, le dice su Padre.
De repente me sacan la capucha, tengo que adaptar mi vista a la luz, veo un hombre de unos 30 años, mulato, grande, tatuado, calvo o rapado y a otro muy joven 18 o 19, se nota el parentezco familiar.
-“¡Oh es el maldito que me mando a la sombra…cinco años…cinco largos años ¡”-, añade con notoria furia, levanta el puño para golpearme y una mano se lo detiene…su Padre.
-“! Entiendo tu odio, pero nada, sin golpes, sin violencia, no quiero tener otra vez a la DEA y el FBI en mi puerta, yo me encargo de él luego, parecerá solo un accidente carretero pero…no se te ocurre algo para hacer con la chica, tal vez para que el presencie y se lleve consigo…después de todo has estado fuera del juego cinco años…cinco años…sin carne, Brunito debe debutar ¡”-, dijo el gordo en inglés, mi mujer no entendió la conversación y siguió calma.
Pedro el exconvicto, mira a mi mujer, si bien ella es mayor que él es una mujer y está bien buena y un fuego perverso brota de los ojos del maleante.
Se acerca a ella y de un tirón le rasga el vestido, ella grita de la sorpresa, el gordo ríe a la par con sus guardaespaldas
Ella trata de cubrirse con los restos de la tela, el tipo la empuja la hace caer de bruces sobre la cama con la cara hacia mi y nuestros captores, luego le levanta la falda, dejando ver su bikini negro y su bien formado trasero, firme, redondito.
-“¡Ah!”-, dijo Pedro con admiración notoria.
-“¿Tú te comías esto solito?, ¿Son los réditos de ser funcionarío público?, dijo con sarcasmo mirándome con odio.
De un tirón arranca el biquini, dejando ver el culo blanco de mi mujer y su rajita, ella grita del susto, luego Pedro escupe su mano y busca introducirla dentro de la concha de ella, que cierra con fuerza las piernas.
Miami Vice
Segundos mas tarde sus dedos exploran el interior de la concha de mi esposa, ahora ella llora, la otra mano de Pedro lucha por dejarla desnuda.
-“¡Bruno no te quedes ahí parado como tonto, ayúdame a dejarla en bolas ¡”-, le recriminó a su bisoño hermano.
Durante 10 largos minutos tiran y hacen jirones lo que le queda del vestido, le sacan los zapatos y arrancan el flamante brassier de 50 U$S, ni reloj, pulseras, carabanas y pendientes, todo le sacan, le sueltan el pelo, enteramente desnuda ha quedado, sobre aquella cama y a merced de esos tipos.
Bruno la mantiene sujeta y Pedro se desnuda, mostrando un cuerpo tatuado y un enorme pene casi deforme, separa las piernas de ella e introduce su boca en su ano y concha.
-“ ¡ Hayyy ¡”-, gritó ella de dolor al sentir unos dientes morder con ganas su clítoris.
Bruno, separa los glúteos de mi esposa y Pedro moja con saliva su miembro, lo apunta hacia el medio de las dos naglas…
-"Cinco años sin una mujer, cinco años de celibato forzado por 50 gramos de pésima coca, pero esto acaba ahora"-, masculló Pedro.
-“¡ Aaaaaggggghhhhhhhh,aaaaahhhhhhaaaaaaayyyyyyyy ¡”, un intenso, femenino, agudo grito de dolor, hizo eco en las paredes de la casa, era mi mujer que era violentamente enculada, la cama rechinaba, un hombre bramaba como toro.
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-¡Uff, ufff, ufff, si grita, zorra, ves lo que es un verdadero hombre…ah…ah¡-, rugía Pedro y le daba con ganas, recordando como su tío murió al hacer estallar, el éter del laboratorio clandestino en los cayos, cuando el Fiscal Guzmán Kerry lo tenía cercado, mi esposa luchaba por sacar ese pesado cuerpo de arriba, mientras sentía como su culo era abierto y una sensación de punzante dolor partía de su ano.
Paf,paf.paf era el ruido repetido, al golpear piel con piel pelvis con glúteos, entre los repetidos, !Ahgg!, !Aaahggg!, !Hay! que partían del desfigurado rostro de ella.
Bruno excitado no perdía el tiempo y se desnudaba reclamando una parte del regalo de su Padre.
Fue una cogida dura, intensa, parecía que el pene del tipo saldría de la boca de mi mujer, que terminó con un gran rugido del hombre al vaciar cinco años de esperma contenido en sus huevos dentro del culo de mi esposa.
El hombre chorreaba sudor sobre mi mujer, retira su pene flácido dejándola con el esfinter abierto chorreando.
-“Vamos es tu turno”-, le dice Pedro a Bruno.
Entre los dos hermanos la fuerzan a darse la vuelta, ella cubre sus tetas con sus manos y cierra las piernas.
Pedro la sujeta de las muñecas y la obliga a enseñar sus tetas a Bruno, las ven por primera vez, pezones grandes y rojos.
Bruno lucha por separarle las piernas.
-“¡No…por favor ¡”-, gimotea ella.
-“Vamos dame la cuquita”-, le dice bruno en un pésimo español y ella por vivir, cede a la presión y deja que le abran la piernas, enseñando al chico los gajos de su rosada y cerrada,bien definida y rasurada concha.
El chico se prende como lapa de las tetas de ella y con una mano trata de acomodar su verga entre la piernas de ella, es novato y le erra varias veces, ella está seca y no es fácil de acertarle su glande duro y rojo pega torpemente en los labios vaginales sin lograr entrar en el sexo de la mujer.
Un gritito de desdicha de ella, un “-! No ¡” apagado y cortito, indican que al fin el chico acertó y su pene ingresa en las profundidades de la matriz de ella.
esposa
El chico embiste una y otra vez, busca con su boca los labios esquivos de mi mujer, encuentra su cuello y se deja un sobervio chupetón como cocarda de vaca, ella cierra los ojos, pero la madre naturaleza la traiciona, es mujer y su sexo está hecho para gozar, se moja, el pene entra más, desliza con suavidad, el chico no se da cuenta.
Con sorpresa descubro como mi mujer en esa horrible situación empieza a gemir, primero bajo y cortito , luego con más ritmo, -“Ah...Ah…”, “Ah…Ah…Ah”…Pedro si se da cuenta y su verga toma firmeza, más cuando ella cierra los ojos, abre la boca y emite un bajito, casi inaudible, “! Aaaaaaahhhhhh ¡”, un orgasmo, corto como si por vergüenza no quisiera largarlo, pero un orgasmo al fin de cuentas, veo como sus uñas se clavan en el colchón y su cuerpo se pone tenso, mientras esa corriente electrica la recorre desde su sexo hasta su cabeza.
Bruno sí, emite su primer rugido dejando de ser virgen llenando con su primogenea leche todo el sexo de ella, que al sentir ese conocido calor húmedo, llenado sus ovarios, invadiendo su profunda intimidad, emite un triste, quejido -“¡Noooo¡”-, al ver consumado el coito, el acto carnal con ese desconocido chico que podría se su hijo, el esperma del pibe escapaba de la concha de mi esposa como blanco y espeso yogurt.
Pero su odisea no ha terminado, el chico peligroso, Pedro, hinchado de deseo, hambriento de sexo y deseo de revancha, cegado por la lujuria quiere que ella vibre con él, celoso de su hermano por haberla hecho gozar.
Ahora su enorme verga mira al cielo, es enorme parece implantada de un caballo, él se ha recostado boca arriba en la cama y reclama por ella.
-“! Ven aquí rica putita, ven a montar a papi ¡”-, grita Pedro, inquieto y excitado.
_-“ ¡ No más no…¡”, lloriquea mi mujer mirando el enorme falo inyectado en sangre que le espera en el extremo de la cama.
Ella me mira y mira al gordo que se ha puesto serio, entonces llorando en silencio, gatea hasta donde está Pedro, resignada, abre sus piernas y sube sobre él, Pedro apunta su enorme verga a la vulva blanca y poco a poco mientras ella deja caer su cintura, la descomunal pija, entra en ella, abriendo a reventar la vulva y favorecida por el efecto lubricante del esperma de Bruno que aún estaba dentro de ella.
El ríe satisfecho y le da palmadas en las nalgas para que cabalgue, veo como el pubis de mi mujer se hincha por el gran pedazo de carne de varón que la rellena.
Durante largos minutos ella lo cabalga tratando en vano de reprimir las sensaciones que la invaden, pero no puede y gime cada vez más, mientras él le masajea los pezones, hasta que ella llega a un largo orgasmo que tras morderse los labios, explota en un largo -“¡ Aaaaaaaaaahhhhhhhh ¡”-, Pedro aguanta para no eyacular, minutos mas tarde ella sudando gime, mirando hacia donde estoy -“Lo siento amor, no puedo, no puedo aguantar…ya…ya viene…noooo…acaaaaaaaaaaabooooooooo…aaaaaaaaahhhhhhhhhh”, mientras masajeaba sus tetas, abría su boca y llegaba a un intensísimo climax, todo el tiempo Pedro le masajeó el clítoris, ahora él estaba a punto de estallar…
-“Te voy a meter una inyección de caldo caliente…ya…te lleno”-, ruge él.
-“! No¡,no,no,no…”-, chilló ella, tratando de sacar el pene del narcotraficante de dentro de ella, levantando su cintura,pero de un tirón él con sus fuertes manos tira de ella de su cintura hacia abajo,el gran pene se hunde hasta los huevos desapareciendo, en ese momento un bramido masculino y los ojos de mi mujer que se abren en forma enorme con una gran mueca de desesperación, indican que le ha inyectado sin piedad, sin anestesia una enorme dosis de semen caliente, practicamente dentro del mismo útero,bañando los ovarios, llenado las trompas, útero y vagina...ella lo sabía no tomaba pastillas y en esas fechas ovulaba, ya se imaginaba preñada por este exacrable sujeto, su ADN casándose con el de ella formando un bastardo en su interior.
pareja
Bruno, toma de la mano a mi abusada mujer, la hace bajar de la cama.
-“Ven mami arrodíllate aquí”-, dice en su horrible spanglish.
Ella obedece, también Pedro baja, ambos hermanos de pie con mi mujer arrodillada en medio.
-“Chupa”-, le ordenan.
Ella en cuclillas chorreaba semen, que burbujeba desde su sexo.
Solo a Bruno le pudo mamar el falo, pues el de Pedro no entraba en su boca, con cada mano en sus penes los mastubo, hasta que le dijeron…
-“Abre la boquita”-, ellos la bañaron, esperma en su cara, boca, manos y tetas, no pudo tragarlo y escupió en el suelo…grandes carcajadas.
El gordo conforme, les dijo, -“Vamos chicos, Pedro Clarita te espera”-, abrazó a sus chicos y desaparecieron por la puerta.
Los tres raptores aparecieron nuevamente, traen un vestido barato de mujer, le lo tiran a ella.
-“Vístete zorra, ah…chingas muy bien”-, dijo uno de ellos.
Mi mujer se viste, no hay ropa interior, a mi me desatan y nos conducen al coche, paran en nuestro hotel y no nos dejan bajar, donde uno de ellos desciende y vuelve con nuestros pasaportes, sin perder tiempo nos llevan al aeropuerto y tras una espera de una hora, siempre escoltados, nos ponen en el avión.
Retorno…
En el avión estoy tan cerca de ella que huelo su olor a esperma, que aún le gotea de la entrepierna, tiene un aspecto tan malo y de cansada que una azafata le pregunta si está bien, ella solo opta por ir al baño y lavarse un poco.
Ya de vuelta acudimos a un médico que le recetó antibióticos y antiparasitarios le puso un anticonceptivo inyectable y le hizo análisis de venéreas, que debíamos repetir 45 días después.
Pasó un mes y no menstruó a lo que adjudicamos al inyectable, pero 10 días más tarde le noté los pechos grandes y las caderas más anchas, un líquido viscoso partía de sus pezones, a los 45 días el médico confimó, ¡Preñada¡`,el anticonceptivo falló habían pasado muchas horas,las venéras dieron negativas.
Quince días mas tarde, un legrado acabó con el embríón, pero yo aún tengo pesadillas donde se cogen a la fuerza a mi mujer, un coito extraño, una eyaculacíón tan larga y profunda que veo como el agresor entre carcajadas la ordeña los pechos a ella y sale…esperma.
No hemos vuelto a hablar del tema, que pasó con el Senador, nosé, con ellos, tengo entendido que murieron en guerra de bandas con los Mara.
Pero si vovemos al caribe será para conocer alguna isla.
FIN.