CORROMPIDO POR MI MEJOR AMIGO
( Relatos Gay )
Si bien es cierto que siempre tuve fantasías sexuales con hombres nunca las he llegado a concretar, por miedo, por vergüenza... en fin, pero esto cambió por la influencia de mi amigo de la infancia. El se llama Rafael, al igual que yo es maduro, tiene 35 años, yo 37. Hemos sido amigos muy unidos desde pequeños, no sólo nosotros dos sino las familias completas, Rafael se casó a los 30, pero se separó a los dos años después, yo también me casé a los 28 y al igual que Rafael me terminé separando 3 años después.
Con el tiempo y para abaratar costos nos fuimos a vivir juntos al dpto de Rafael, ahí comenzó la historia. Él quería explorar la bisexualidad me lo dijo una noche mientras bebíamos unas cervezas y mirábamos una película, yo le dije que también tenía esa fantasía, pero era sólo fantasía. Pasaron unos días y Rafael me dice que vamos a una disco gay a divertirnos, que nunca ha conocido alguna, que la vida es muy corta, que si nos aburrimos nos largamos de ahí y nos vamos a buscar algunas mujeres para terminar la noche, en fin terminó convenciéndome y salimos rumbo a una disco que encontramos en internet, estaba un poco alejada del centro de la ciudad. Música, alcohol, gente ebria, casi todos hombres, algunas mujeres que bailaban entre ellas sin importarles los hombres.
Estábamos ahí con nuestro cuarto o quinto trago cuando se nos acercaron dos hombres, estaban muy bien, tendrían nuestras edades o por ahí, uno de barba con tipo gimnasio y el otro más alto más corpulento, también con tipo gimnasio, nos preguntaron si podían hacernos compañía, pensé en decirles que no, pero Rafael accedió de inmediato, conversamos, nos reímos, luego nos invitaron a bailar y justo comenzaron a tocar música lenta, romántica, uno de ellos me tomó entre sus brazos y comenzamos a bailar, a mi lado estaba Rafael con el otro tipo también bailando. Esteban que se llamaba el hombre que bailaba conmigo empezó a acariciarme la espalda, apretándome con fuerza hacia él, luego sus manos bajaron hacia mis nalgas, sentí una calentura que me recorrió entero más aún al darme cuenta que su verga estaba erecta y chocaba con mi cuerpo, sin poder resistirme acepté sus besos.
Nos fuimos los 4 de la disco y llegamos al dpto, nos sentamos mientras Rafael trajo más cervezas, Esteban me acariciaba abiertamente, me abrió la camisa y chupaba mis tetillas, se sumó el otro hombre mientras Rafael miraba. Me desnudaron completamente, metieron sus vergas en mi boca, que chupaba con ansias como un animal. vi como Rafael desnudo se acercaba también a mí y ponía su verga en mi boca, no lo podía creer era mi mejor amigo! luego Esteban empezó a penetrarme y aunque me dolía lo dejé hacer, del dolor pasé al placer, y luego a pedir por favor que me enterrara ese pene todo dentro mío, que lo quería completo, no sé muy bien en que momento Rafael se acomodó de tal forma que Esteban y él me penetraron al mismo tiempo, era la primera vez que tenía sexo con hombres y ya me estaban culeando dos al mismo tiempo, sin perder tiempo el otro tipo puso su verga en mi boca, así estuvimos largo rato hasta que no pude más y me corrí, Esteban y Rafael se corrieron dentro mío y Agustín se corrió en mi boca.
Pasaron algunos días yo evitaba hablar del tema con Rafael, hasta que una noche, él me dijo que saliéramos a dar una vuelta, acepté y nos metimos en el auto, no sé hacia donde iba Rafael, lo cierto es que se detuvo en una zona alejada de la ciudad, estaba lleno de matorrales, no era una zona habitada. Rafael me tomó de la mano y me llevó con él por un sendero hasta que llegamos a un claro rodeado por árboles y matorrales, no lo podía creer ese lugar estaba lleno de hombres de todos los tipos y tamaños, caminaban desnudos prácticamente, exhibiendo sus penes erectos, otros estaban tirado sobre el paso penetrándose unos a otros chupándose las vergas, me sentí caliente de inmediato. Rafael se acercó y empezó a desnudarme, no dije nada, quedé sin ropa a la vista de todos, vi como se acercaba un hombre mayor tal vez de unos 60 años y me tocaba luego comenzó a chuparme la verga llegó otro y otro, en un segundo aquello era una orgía, me senté sobre un macho y hundí su verga en mi culo mientras le chupaba la verga a otro y pajeaba a otro más. Quedé impregnado de semen por todo el cuerpo. Rafael se recostó en el suelo y me senté sobre él, su pene se deslizó con facilidad hasta llenarme por completo, me moví sobre él hasta hacerlo correrse dentro mío, en ese momento mi boca estaba llena de verga de un muchacho tal vez menor de edad que se acercó a mí, cuando Rafael me llenó de leche el culo, apresuré la chupada y el joven se corrió abundantemente dentro de mi boca.
Así fue como Rafael comenzó a usarme para llevar a cabo sus fantasías, y eso me fascinaba.
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