Relatos Eroticos | Mi mujer, mi puta

Les Relataré como mi mujer ahora es mi puta.
Todo empezó cuando al llegar de trabajar me encontré a mi linda mujercita con un short que apenas le tapaba su rico trasero y una blusa de tirantes de tela muy delgada que permitía apreciar sus enormes tetas y esos ricos pezones resaltaban como apuntando al cielo. Todo en un inicio era normal, cenamos y me fui a bañar para después ir a dormir, mientras me bañaba me regreso a la mente la rica imagen de mi mujer y se me puso como fierro así que estaba dispuesto a tener una gran sesión de sexo. Cuando salí del baño y me diriji a la recamara y o sorpresa mi mujer estaba con un conjunto de lenceria rosa con tanga de hilo dental, se veia demasiado rica. Cuando me vio entrar me dijo "tardaste mucho ya te quiero aquí conmigo date prisa".
Me lancé hacia ella comencé a darle un beso tan tierno como pude, poco a poco fui bajando a su cuello que es la parte que mas excitación le provoca, así poco a poco la puse al 100 hasta que la senté en el tocador y baje hasta su coño el cual bese sobre su tanga que estaba totalmente empapada, la hice a un lado y comencé a besar sus labios superficialmente poco a poco fui metiendo mi lengua lo mas profundo que pude, así estuve como 5 minutos hasta que comencé a succionar su clitoris y darle ligeros mordiscos, no tardo mucho y tuvo su primer orgasmo. Después de unos 20 minutos de sexo oral me pidio que me recostara que era tiempo de que yo gozara. Comenzó acariciando mi verga y mis huevos hasta que se puso como piedra, la empezó a besar y meter a su boca, se que no la tengo muy grande pero era muy rico ver como mis 17 cm se perdian dentro de su boca, me dio una mamada de 25 min hasta que no pude mas y termine en su boca, ella se trago toda mi lechita, no dejo que se desperdiciara ni una gota.
Nos seguimos besando y en muy poco tiempo ya tenia mi verga tieza, recoste a mi mujercita y comence a sobarle su panochita con mi verga hasta que la coloque en su entrada y poco a poco se la fui metiendo, ella gritaba de placer con cada embestida, el mete saca fue subiendo de nivel tanto que llego al grado que parecía que lo que quería era atravesarla, las embestidas eran tan fuertes como sus gritos y no me importaba que los vecinos de los departamentos de al lado nos escucharan, después de un rato me sali de ella y la lleve hasta el comedor, ya estando ahí la recoste en la mesa y coloque sus piernas en mis hombros nuevamente se la metí con tanta fuerza como pude, así estuvimos un rato hasta que ella me pidio que se la metiera de a perrito, la lleve a la sala y la puse en cuatro, la vista era espectacular su enorme trasero a mi total disposición, se la metí y su cuerpo se arqueaba con cada metida de su boca solo salían "vamos papi metemelo duro dejame satisfecha para que no piense cosas malas cuando no estas" esas palabras me exitaron mas y se la metía con unas ganas de meterle hasta los huevos. Mientras le daba de a perrito con una mano hacia presión en su espalda baja y con la otra acariciaba su rico y apretadito ano. Fue tan rápida la estimulacion que en muy poco tiempo ya le había metido un dedo y para nada se quejo, a pesar de que a mi mujer no le agrada mucho en sexo anal.
Seguimos cojiendo por un largo rato hasta que no pude mas y me vine dentro de ella llenándole su panochita de leche.

Nos levantamos y ella se fue al baño para limpiarse la leche que recurría por sus piernas, yo también limpie mi pito y me coloque mi bóxer pensando en que la sesion se sexo había terminado. Cuando ella regreso del baño lo primero que me dijo fue "que apoco ya no vas a querer mas" yo no sabia que pasaba con mi mujer por que aunque si es muy cachonda no es para nada adicta al sexo pero en fin tenia que aprovechar la oportunidad. Me quede recostado y ella comenso a darme una mamada para reanimarme. Ya cuando estaba durisimo se monto sobre mi y de un solo se ton se lo metió todo, ella gritaba como nunca, estoy casi seguro que los vecinos nos escuchaban y eso me excitaba mas, así estuvo cabalgando un buen rato hasta que se detuvo y se dirigió al tocador, tomo una botellita de aceite y me comenzó a untar la verga con el, era muy rico lo que estaba pasando pero aun no pasaba lo mejor, ella se alejo unos pasos de donde yo estaba y se puso de a cuatro, tomo aceite en su mano y ooh riquisimo comenzó a untarse su ano con el aceite, en pocos segundos ya tenia un dedo adentro con un rico mete saca, yo solo disfruta la función de cine porno en vivo, ella me saco de mi trance diciéndome "que esperas que yo haga todo, anda le aquí esta para ti", me lance hacia ella y sin mas coloque mi verga en la entrada de su ano, yo pensaba en meterlo despacio para no provocarle ningun dolor, pero cual fue mi sorpresa cuando ella sintió la punta en su entrada de un solo movimiento que hizo hacia atrás se lo metió todo dando un fuerte grito pero de placer, y ahora si estaba haciendo algo de lo que mas me gusta, aun recuerdo sus palabras "sale papi rompe me el culo con esa rica espada, sacaste lo puta que llevo dentro y ahora me calmas o busco quien me calme" esas palabras me provocaron celos pero a la vez me excitaron así que como no estaba dispuesto a compartir a mi puta me dispuse a darle todo lo que tengo. Se la comencé a meter y sacar de su apretadito ano, metiéndola hasta la base. Ella gritaba y pedía que no parara que la matara de placer. Mientras mi verga entraba en su culto con mi mano estimulaba su clitoris hasta que tuvo un squirt ahora si que se estaba viniendo a chorros, eso me calentó de mas y pronto le llene su culo de lechita, cuando terminamos me salí de su culo y ella me dio una mamada dejando mi verga limpia y reluciente.

Así pronto nos quedamos dormidos totalmente desnudos, no podía creerlo, mi mujer se convirtió en mi puta por esa noche, le di en su boca, en su panochita y en su rico culto.
Les dejo fotos de como encontré a mi mujer cuando salí de bañarme y de cuando le quitaba su ropa