Trío de oro.
( Relatos Heterosexuales )


Hola, mi nombre es Jan, soy de Santiago de Chile y ya tengo 45 años. Voy a contarles la mejor experiencia sexual de la que tengo aun recuerdo.
Esto empezó para mí a los 13 años, y en mi país recién entraba la onda por la televisión. Mi padre compró un televisor de esos grandotes, que se demoraban un siglo en calentarse para poder ver la imagen. Mi familia era una de las poquísimas que tenían el lujo de tener un aparato de éstos, motivo por el cual poco a poco mi casa se fue convirtiendo en un ir y venir de amigos que querían ver la televisión. Una de esas personas era Miry, una muchacha que vivía en la casa de enfrente. Ella tenía 16 años, y era ya casi toda una mujer. Tenía desarrollados unos grandes pechos y la verdad que yo le llegaba en porte hasta la altura de su nariz. Recuerdo que en una oportunidad quedé solo en casa, pues mis padres fueron a ver una función de cine y de ahí irían a comer, motivo por el cual llegarían muy tarde a casa. Mis dos hermanos mayores se encontraban fuera de la ciudad en un Jamboree (eran scout). Antes de salir, mis padres me dicen que para que no me quede solo, le pidieron a nuestros vecinos de enfrente que me pudieran venir a ver de vez en cuando, para que yo no estuviera tan solo. Bueno, demás está decirles que quien llegó....fue Miry. Había notado que siempre me miraba cuando veíamos la TV, llegó muy arregladita, y apenas transcurridos una media hora de que mis padres se habían ido, sucedió lo inesperado. Rápidamente se puso de pié, se dirigió a mi sillón y me dice: te amo!!....Yo, a esa edad, la verdad que no estaba aun en onda de verla como mujer. Me molestó en un principio que me agarrara a besos. Luego me levantó la polera y me comenzó a besar en el bajo vientre, y yo, sorprendido me di cuenta de cómo mi aun virginal verga comenzaba a levantarse. Crecía...crecía...más de lo que había alguna vez imaginado. Miry me mira fijamente y me dice que cierre mis ojos. Como me estaba gustando lo que ella hacía obedecí de inmediato. Ahí sentí que algo húmedo encerraba mi verga, y comencé a sentir algo increíble. Cuando abro los ojos, veo a Miry mamando como si fuese a acabar el mundo. De pronto, ella deja de hacer eso tan exquisito y se pone frente a mí, se levanta su falda y ahí me doy cuenta de que esta muchachita venía sin ropa interior, tan solo portaligas (que después supe que así se llamaban). Vi su entrepierna con un abundante vello, lo que me produjo algo extraño ver aquello, y pensando en que a mí recién me estaban saliendo pelos pero nunca tantos como los de Miry. Se acerca y me dice que quiere que se lo bese. Yo, aun excitado y todo no quise. Pero ella insistía, y que si le daba en el gusto, me dijo que haría algo que me haría sentir algo mucho más rico que lo anterior. Ante eso, opté por probar. Al meter mi lengua, sentí un sabor agradable, aun más...estaba muy fragante, así que despues me comenzó a gustar hacerle eso.
Sin darme casi cuenta, ella nuevamente se pone de pié rápidamente, se levanta su falda hasta la cintura y se voltea, toma mi verga y se la coloca en su mojada vagina. Se comienza a sentar en mí lentamente, y yo voy sintiendo algo muy tibio que recorre mi incipiente y primeriza verga. Afirmada en el apoyabrazo del sofá comienza a subir y bajar, haciéndome sentir un placer que nunca había experimentado. Al cabo de algunos minutos se corrió profiriendo unos gritos que me asustaron un poco, pues temía que alguien podría escucharla. Tenía frente a mí, un culo desproporcionado para mi edad, lo tocaba, lo afirmaba para darle una y otra estocada con mi dura verga. Sentía un placer inmenso, hasta que me corrí por primera vez en mi vida dentro de una mujer. Cuando acabé, ella se levanta y una mezcla de jugos de ella y los míos cae de su vagina deslizándose por sus piernas y otro poco cae encima de mi vientre.
Bueno, a contar de ése día las visitas eran más frecuentes y yo esperaba el momento de quedarme un rato a solas en la casa, para ir a avisarle a Miry, la que acudía de inmediato al llamado.
Después, con el correr de los años, esta relación se fue haciendo más poco frecuente, hasta que ya un día no ocurrió más.
Y he aquí que paso a contarles lo mejor. Miry ya tenía 24 años y yo recién me empinaba por los 21. Mi prima Nora era muy amiga de ella y solíamos juntarnos en su casa un grupo de amigos. En una de esas oportunidades, estando en la casa de mi prima, me entero de que mis dos primos menores se habían ido a la playa con mi tía, y mi tío se iba esa noche para acompañarlos, y que mi prima se quedaba solamente acompañada....por Miry.
Charlábamos, cuando en eso suena el timbre de la casa de mi prima...era....Miry. Al verla, me vinieron los recuerdos de todos los momentos sabrosos que pasé con ella. Al verme, se notó que se alegró por ello. Venía con su bolso para quedarse unos días con mi prima. Nora, me dice que porqué no las acompaño, porque en realidad aunque estaban ellas dos ella sentía un poco de miedo a la noche, ya que nunca se había quedado sola en casa. Le dije que avisaría en mi casa para que supieran en dónde estaban. Tomé el teléfono y le comunico a mi madre que me quedaba en casa de mis tíos y que nos acompañaba Miry (para que nos fuese a pensar nada de mi prima y de mí).
Cuando llegó ya la medianoche, Miry y Nora se pusieron sus tenidas para dormir. Nora con un pijama de satén azul, de pantaloncitos cortos, y en realidad se veía muy bonita (siempre hubo buena onda con mi prima, pero nunca nada de sexo ni nada que se parezca). Miry en cambio, me deja helado...sale al living en donde estábamos sentados con Nora y nos dice: ¿Cómo me veo..?...tenía una bata delgadita, la abre y muestra sus tremendas piernas.....en baby doll. La verdad que me costó controlar mi erección. A todo esto ya llegó la hora de irse a dormir , siendo ya como las 2 y 30 de la madrugada. Me acosté en la cama de mi primo Daniel y cuando ya comenzaba a quedarme dormido, y pensando en lo excitado que me había dejado Miry al verla. En eso siento la puerta de la habitación que se abre. Enciendo la luz de la mesita...y con alegría veo que es Miry. Se sienta a mi lado y me pregunta: ¿me has extrañado?...sí, respondí excitadísimo....”apaga la luz”, me ordena, a lo que procedo de inmediato. De inmediato y sin preámbulos ella mete su pierna entre las mías y sientro su vientre caliente...suave...y ya no aguantando más me pongo encima de ella y la penetro de una sola vez. Comenzábamos ya a movernos con la excitación a más no poder, cuando se enciende la luz principal del cuarto....sí...mi prima Nora, que nos sorprende en plena faena. Un poco molesta, nos manda el sermón que porqué no respetábamos su casa...que era la cama de su hermano...que sus papás que dirían...etc.   Miry se acerca a ella y la toma de la mano para calmarla. Yo trato de taparme con la sábana, y se sientan juntas al borde de la cama. Y he aquí al final lo mejor del cuento.
Miry, caliente como estaba, yo sabía que lo único que quería es que yo terminara con ella lo que habíamos comenzado. Y sin darme cuenta casi, me destapa y me toma la verga y le dice a Nora que la tome...ella por supuesto se niega, pero Miry le toma la mano con fuerza y hace que me la toque...luego Miry la convence para que la coga con ambas manos. Yo, en silencio solo miraba lo que estaba pasando.
Me quedé pasmado cuando mi prima me agarra con ambas manos el miembro...lo apretaba, lo sobaba como si fuese un animalito. En eso Miry , la pone a un lado, me agarra la verga y me comienza a dar una mamada espectacular. Cierro mis ojos y solo me dejo degustar. Tienen que haber pasado algunos minutos, cuando abro mis ojos y me doy cuenta de que la que me lo está mamando ya no es Miry...sino mi prima. Eso ya me excitó de sobremanera, entonces me coloco en medio de las piernas de Nora y comienzo a chupar su jugoso clítoris.. Habíamos quedado los tres desnudos gozando como chinos, y empezamos a inventar poses, primero coloqué a mi prima en posición y pongo mi verga en la entrada de su rubia conchita, y me doy cuenta de que ella era virgen, pues no podía metérsela a pesar de lo mojada que estaba. La abrí de piernas, y pasé mi glande por sus jugos hasta que fui penetrándola lentamente....ella gemía, mezcla de dolor y placer, hasta que ya se la entré entera. Mientras penetraba a mi prima, ésta le succionaba el clítoris a Miry que me metía toda su lengua en mi boca. Luego chupaba sus pezones mientras embestía una y otra vez a mi prima.. Después cambiaron de lugar, se la metí de un viaje a Miry y a la vez ella le chupaba el clítoris a mi prima. Nunca me había fijado en los hermosos pechos de mi prima, los que comencé a chupar con todas mis ganas..
Bueno, la primera que se corrió en un orgasmo larguísimo fue mi prima....gritaba como si hubiese alcanzado el cielo. Después Miry me decía que se lo metiera fuerte....dame..dame fuerte, me decía....y se corrió arqueando su cuerpo y dando grititos cortos como si fuese a cantar. Y al final me corrí yo....en la boca de Nora y compartiendolo con Miry.
No la quería creer. Dos mujeres chupando y mamando mi verga a la vez. Era un sueño. Una vez repuestos lo hicimos dos veces más y nos quedamos dormidos.
A la mañana siguiente, como a eso de las 10 de la mañana, sentí un dulce despertar. Sentía que me mamaban nuevamente la verga. “Debe ser Miry”...pensé.   Error....era Nora. Me volví a excitar y sin más preámbulos la volví a clavar. En eso despierta Miry, la que sin perder tiempo se acopló a nosotros.
Bien. Dos veces más lo hicimos, y ahí en verdad yo ya quedé hecho mierda, pero con una sonrisa de oreja a oreja.
Con el tiempo, Miry, mi prima y yo salimos varias veces. Nos ibamos a un motel, y ahí le dábamos hasta muy tarde. Esto duró unos dos años y medio, período en que no tuve novia, porque ¿para qué?....mi prima y Miry tampoco tenían nada serio. Ya después mi prima se fue a estudiar al norte y solo los encuentros se hacían con Miry, hasta que llegó mi momento de irme también a estudiar a la universidad fuera de Santiago.
Estudiando conocí a la que hoy es mi esposa. Ya no he vuelta a tener nada igual con nadie, salvo ricas experiencias con mi esposa, pero siempre recuerdo esos momentos sublimes de mi juventud....con mi vecina Miry y sus tremendos pechos....y lo rico que fue hacerlo con mi prima Nora.




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Heterosexuales

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