Me emborrachaba y me ponia e lcuerno
( Relatos Cuerno )
Ellos mi mujer y mi amigo que invitaba a mi casa los fines de semana siempre habían hecho que tomara mas que ellos hasta ponerme briago Asta quedarme perdido y al otro día le preguntaba qué a qué hora se había ido diciéndome siempre que despuesito de que me había dormido, hasta ese viernes que sin decirles que me sentía un poco mal de mi estomago y para no fastidiar la reunión fingía tomar echando los tragos a una maceta que tenia a mi lado, empecé a mostrarme como si de verdad estaba ebrio y les insistía para que ellos tomaran
En un momento dado y después de varias horas Martha se fue a la cocina para traer hielos y al tardarse, mi amigo fue hacia donde ella con el pretexto de pedirle unos limones, y desde yo me encontraba recostado en el brazo del sillón y mis ojos entrecerrados podía apreciar la figura completa de espaldas de ella con su falda corta arriba de sus rodillas su blusa blanca transparenté su brasier de media copa de fino encaje, sus zapatos de tacos que hacían que se viera mas alta y mas buena, Emilio se fue acercando a ella y paso sus manos por abajo de sus brazos hasta tocarles sus pechos y y besarle su cuello su oreja, ella volteo hacia donde yo me encontraba y al ver que seguía en la misma posición se voltio de frente hacia Emilio , paso sus brazos por la nuca de, entrelazándose en un beso intenso las manos de Emilio subieran la falda de martha hasta su cintura y empezó a magrearle las nalgas y el cabron parecía pulpo porque le desabrocho la blusa se la quito y le quito el brasier sin que ella se resistiera, mi primer impulso fue la de levantarme y mandarlos a la chingada, estaba petrificado y con mi corazón acelerado y con un dolor muy fuerte en todo mi ser, vi que la había subido a la barra de la cocina y le mamaba las tetas y oía como gemía de placer, también como levantaba las nalgas para que le quitara la tanga blanca, Martha le pidió a Emilio que cerrara las puertas de cantina que hay para ingresar a la cocina sin que se cerrara totalmente tal vez le daba temor que pudiera descubrirlos, y el le contesto que no quiero ver al cornuudo de tu marido cuando te este cogiendo sus pies quedaban colgados en la barra y volvia a gemir pidiendole a Emilio que se la mamara ,aaahhhhh que rico decía , maaaassss quiero maaasss que rico me la mamasss papi, mmmasssss me haces llegar al cielo, a lo que Emilio contestaba te gusta te gusta cómo te mamo tu cosita puta, ella le contestaba si mi amor me encanta como me la mamas, mira que el pendejo de tu marido allá dormido y yo mamándote la panocha jajaja si que eres bien puta perra siii soy bien puta porque así me has hechos y bien que te gusta vi como sus pies tocaban el piso y se ponía en cuclillas para bajarle el pantalón mamarle la verga asi durante 5 minutos oi como gemía y le decía asi perra mamame la verga aaaahhhhh haaaaaa hasta que oi como exhalo un gemida haaaaaaa trágatela toda la leche que perra le decía y y oía como ella se atragantaba de su leche auuuggggg , la hizo que se recargara en la barra con sus manos y ella paro su rico culo y el por detrás le acomodo su verga a la entrada de su pucha y y de un solo golpe se la introdujo hasta los huevos ella exlamo un grito de dolor y placer haaaaaayyyyy aaaaaahhh y a pedia massss maaasss pedia Emilio acelero sus movimientos y tomándola del cabello la halo hacia atrás, Martha pedia mas mmaaassss maaasss fuerte cqbron le pedio el de decia toma puta m verga eres mi puta verdad perra siiiii siii soy tu puta te voy coger siempre delante del bueyon de tu marido eso hizo que ella moviera mas su culo hasta que exclamo un aaaahhhhhh síntoma de un fuerte orgasmo enseguida el hizo lo mismo quedándose un rato pegaqdos como perros el recargado en la espalda tocándole las tetas que le colgaban, a mi me empezó a doler la cabeza y a sentirme mareado revolviéndome el estómago por lo que me pare de inmediato y me metí a una habitación que había a un lado de la cocina con servicio cerrando la puerta de un golpe, me incline en el baño y empecé a vomitar el poco alcohol que había ingerido, no habían pasado ni 5 minutos cuando se abrieron las puertas de la recamara y del baño entrando Martha preguntando si estaba bien, s,i si algo me cayó mal le conteste no pasa nada y le pregunte si Emilio ya se había marchado contestándome que no que estaba en la sala, le pedi que me dejara solo y ya un poco calmado me regrese a donde están ellos ella estaba sentada frente a el pase de largo hacia la cocina y ahí debajo de la mesa se encontraban las tangas de Martha no las había recogido me asome sin que se dieran cuenta y ella le abría las piernas para que el le viera la panocha ya eran las tres de la mañana y Emilio en cuanta me vio dijo que ya era tarde y que se retiraba nos subimos a nuestra recamara y ella se puso la mini bata para dormir y ebrazandome se quedo dormida con una sonrisa en la boca y yo me la pase en vela pensando en lo que había sucedido.
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