Con mi amigo de la oficina
( Relatos Heterosexuales )


Hola otra vez estoy de nuevo por aquí para contarles mi última aventura, hace meses entro a trabajar un contador a la oficina él se llama Alfredo, el es muy guapo y todas en la oficina morían por él, solo que él era muy odioso y a nadie le hablaba. Un día el llego a comer y yo estaba en el comedor calentando mi comida, ese día comenzamos a platicar y en la plática salió que vivíamos muy cerca, a lo cual nos empezamos a ir juntos un día fuimos a tomar un café, ese día yo llevaba unos leggis negros y una blusa descotada negra, como ya les he contado en otros relatos tengo unas tetas grandes, así que ya se imaginaran como casi se salían de la blusa Y bueno ese día compramos para acompañar el café un pastel de zanahoria, una migaja grande se me fue hacia los pechos y me reí y trate de sacarla y él me dijo te ayudo, a lo que le respondí no té atreves. En eso me besó fue un beso tan cachondo que me empecé a mojar el toco mi vagina y me empecé a poner muy caliente, no lo pensamos 2 veces y nos fuimos al hotel al llegar me empezó a desvestir, besaba mis pechos como loco yo gemía de placer, después me recostó en la cama y me quitó mis leggins y traía una tanguita de encaje negra y empezó a chuparme mi pucha encima de mi tanguita la hizo a un lado, y se empezó a comer mi conchita, sentía como su lengua me frotaba mí clitoris, es un experto con la lengua, me vine a chorros en su cara. En eso le quite el pantalón y empecé a mamaraela es un verga grande, gruesa y venosa, la tome en mis manos y me la metí en la boca no me cabía, me tomó de los cabellos y me empujó hacia el, seguí mamandosela, luego le succione los huecos el hacia una cara de placer, se vino en mi boca y me trague su leche después me puso en 4 y me empezó a meter y sacar la verga yo gemía, me empezó a dar nalgadas fuertes y a decirme "que rico coges puta" así trágate mi verga, que rico te mueves, se me vino otro p orgasmo ya la cama estaba empapada, me vengo cañón y eso a él le encanta, después fue de misionero sentí su verga esa noche como nunca nadie me la había metido.
Pero ahí no termina todo pues los dos somos muy calientes y cogemos donde nos agarre la calentura, nos gusta irnos en metro para que el pueda irme manoseando cuando va súper lleno, me mete los dedos en mi panocha y me hace jadear hay gente que se ha dado cuenta pero no nos importa.
Ya les contaré cuando cogimos en la bodega de triques de la oficina.




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Detalles



Nombre do Relato


Codigo do Relato
5552

Categoria
Heterosexuales

Fecha Envio


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