Cuñada ....
( Relatos Confesiones )

Hace pocos días salí del trabajo muchos más temprano de lo normal, después de la hora de almuerzo así que aproveche el tiempo para ir al gimnasio, pero mi costumbre de no bañarme en el gym hace que me vaya directo a mi casa para ducharme, cuando llego noto que hay alguien en la casa, entro y veo a mi cuñada. Estaba sentada en el sillón viendo su celular… ¿y tú? Le pregunto, vine a dejarle unas cosas a mi hermana me dice y me quede un rato… le doy un beso en la mejilla mostrando un poco de distancia y le digo que me tengo que ir a duchar.
Entro a la ducha y me quedo un rato bajo el agua, abstraído sin querer salir aun, de pronto siento que se abre la puerta, abro un poco la cortina y la veo afuera de la ducha, ¿me puedo duchar? Me dice, mientras se desnuda, hace varias semanas que no nos habíamos visto, y personalmente había dejado todo de esa manera, no quería involucrarme más, aunque siempre pensaba en el cuerpo de ella. Le digo que no, que mejor salga, pero mientras estoy negándome ella entra a la ducha y me comienza a besar el cuello, intento alejarla, pero mi pene no entiende de razones y se pone duro en un instante "parece que dices algo pero tu pene dice otra cosa, Sergio".
Toma el shampoo (o era una crema, ya no lo recuerdo) y me comienza a masturbar haciendo que la espuma se llene en mi erecto pene y mi testículos, me apoyo en la muralla y ella con las dos manos masturbándome de la manera más increíble que se podría imaginar, siento como el agua me recorre y ella con sus manos afirmándolo, demasiado excitante y cada vez mas rápido… le tomo las dos manos para no acabar tan rápido, me queda mirando y me dice "no sé si te extrañe a ti o esto", yo aun sigo apoyándome en la muralla, se da la media vuelta y toma mis manos para llevárselas a esas hermosas tetas, las mueve sobando mis manos con sus tetas y su cola lo mueve acariciándolo con mi pene duro.
Se inclina un poco y toma mi pene para llevárselo hacia su conchita, los dos absolutamente mojados y calientes bajo el agua siento como mi pene ingresa en su conchita "que rico papi" la escucho decir entre sus gemidos, mis manos recorriendo sus tetas mojadas, rozando en el éxtasis y el placer más intenso la sigo penetrando, no pasa mucho hasta que siento que estoy al borde y ella se da cuenta, comenzando con un moviendo descomunal de su cadera acelerando de forma inexplicable mis gemidos que a su vez avisa de que estoy acabando. Me queda mirando y sonríe, nos besamos bajo el agua y sale primero, quedando en la ducha como en las nubes.
No sé cuánto tiempo pasa hasta que salgo de la ducha, me seco y me pongo una toalla tapándome solo de la cintura hacia abajo, no veo a mi cuñada y asumo que se fue, recorro la casa y como no me gusta andar con mucha ropa me quedo solo con la toalla, cuando bajo al living veo a mi cuñada tapada con una pequeña toalla, con sus piernas cruzadas, la toalla solo le tapa desde los muslos hasta sus senos, permitiendo ver sus piernas y un buen escote, cuando me ve sonríe coqueta y me siento en mi sillón, un sillón como para una persona.
La quedo mirando y fue inminente la pregunta ¿hasta cuándo vamos a seguir así? Me mira sorprendida; no lo sé, me responde, créeme que a veces te evito, pero no pude esta vez, no pensé que llegarías temprano…
Me levanto y me siento al lado de ella, en ese mismo momento la comienzo a besar el cuello, sin detenerme se deja besar y pone sus manos en mi abdomen, nos besamos con una pasión desbordada, aun siento la humedad en su piel cuando mi mano recorre hasta el borde de la toalla, el contorno de sus senos, tomo el nudo de la toalla con la que se la afirmaba y lo quito, la toalla se cae lentamente, primero permitiendo dejar libres uno de sus senos el que tomo con una mano. Su respiración comienza a acelerar pero no hace nada y levanta sus brazos para darme más espacio, con su movimiento su otro seno queda en libertad, me alejo un poco y observo su cuerpo semidesnudo delante de mí, una de sus manos recorre mi muslo y sin pedir permiso llega hasta mi pene que volvió a estar duro en un instante, me abre la tolla y se acerca a mi pene, con una mano corre la piel para abajo y se lo introduce en la boca, se acomoda en el sillón haciendo que la toalla se le caiga, desnuda estiro mi brazo hasta alcanzar su conchita pequeña la que comienzo a masturbar, primero con sutileza, pero mientras más sigue con mi pene en su boca no me doy cuenta que comienzo a acelerar con mas dedos dentro.
Hasta que la tomo y la acuesto en el sillón, me pongo delante de ella y comienzo a jugar con mi pene en su cosita, arquea su espalda, un movimiento que personalmente me pone de un modo animal y salvaje, haciendo que la penetre y escucho un gemido, la penetro muchas veces y me abraza con sus piernas, seguimos de ese modo por un rato considerado, acelerando y bajo el ritmo cuando siento que me excito demasiado, acelero muy rápido y bajo la velocidad, cuando lo hago lento me besa los labios y siento su lengua casi con desesperación moverse, lo hago mas rápido y siento sus manos apretar mi espalda, hasta que no puedo mas y lo introduzco muy profundo y acabo dentro de ella, tanto que cuando lo saco noto que brota, menos mal que la toalla sigue en ese lugar sin permitir que deje alguna evidencia en el sillón.
Al rato y ya vestidos, conversamos y compartimos unos cigarros, habrán pasado unas 3 horas desde que llegue y ella lleva un short que le llega debajo de sus nalgas, una remera negra suelta pero algo escotada, salimos a comprar y en el auto le acaricio las piernas, mientras ella lleva su mano a mi jeans, recorremos el supermercado y a rato ella camina delante de mí, sabe que la estoy mirando y cuando lo hace me mira con una coquetería extrema "deja de mirarme el poto" me dice y ríe "no puedo le digo" vemos que no hay nadie y se acerca a mí, solo roza sus labios con los míos y pone su mano en mi jeans, apreta mi pene y se aleja, yo por mi parte cuando veo que nadie ve me acerco por detrás y con mi mano abierta le tomo una nalga haciendo siempre que de un sobresalto.
Volvemos a la casa y preparamos la cena… nos sentamos en sillones separados… pronto dejaremos de estar solos.

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