Toque El Cielo Mi Primera Vez
( Relatos Confesiones )
Leí muchos relatos de “mi primera vez” o algo similar y bueno no convencen mucho a muchos al parecer les gusta muy vulgar o salvaje pero yo no soy del montón y bueno para serles sinceros cuando pierdes tu virginidad debe ser con alguien que realmente ames no con cualquiera yo doy gracias a Dios porque así fue mi primera vez.
Mi historia comienza cuando estudiaba en el ciclo diversificado de mi preparación académica bueno así le llaman acá, ahí conocí a una mujer maravillosa a mi estrella era mi compañera de clases y se volvió muy amiga mía cuando comenzamos a trabajar en los mentados proyectos de seminario eso nos consume a todos, ahí nos hicimos novios de una manera muy extraña nunca se lo pedí solo nos besamos y comenzamos a tratarnos como tal con el tiempo nuestra relación se hizo más formal y como en todas siempre hay problemas no? Que puedo decir cuando lo sabes lo sabes, para no hacerles larga la historia estábamos muy enamorados y en ocasiones que yo la visitaba a ella o ella a mi jugueteábamos un poco uno con el otro, siempre nos besábamos muy apasionada mente y nos tocábamos yo acariciaba su vientre, sus pechos o sus piernas y ella me besaba el cuello, me acariciaba el pecho o me agarraba con fuerza del trasero.
Paso el tiempo hasta que tuve la maravillosa oportunidad y el placer de hacer el amor, fue para el cumpleaños de ella cumplía 18 años una niña de 18 en mis brazos, exactamente fue al año y 4 meses de ser novios que tuve el delicioso placer de hacerlo completamente con ella, cuando lo haces por primera vez con esa persona que amas es lo más maravilloso que te sucede porque no piensas en nadie más, no importa nada tocas el cielo con esa persona porque te sentís como uno solo, ese día lo recuerdo muy bien preste la casa de mis abuelos para una media fiesta porque iban a llegar unos amigos pero el clima nos favoreció pues empezó a llover y todos llamaron para decir que no podía llegar, entonces decidimos celebrar nosotros y como no había nadie en la casa entramos a la que era mi habitación y le dije que le daría el mejor obsequio del mundo me quite la camisa, la tome de la cintura, la abraze muy fuerte, le susurre al oído feliz cumpleaños y comenzamos a besarnos apasionada, desenfrenada y locamente, nos comenzamos acariciar, yo comencé a desabotonar su blusa se la quite, la acosté en la cama y comencé a besar su cuello luego por su pecho su vientre hasta llegar a su pantalón lo desabroche, le baje el cierre y ella me abrazo como temerosa por lo que podría pasar yo la abrace más fuerte porque me gustaba la sensación de mi piel y la piel de ella semidesnudos, luego me vio a los ojos y me pregunto “está seguro de lo que vamos hacer?” y yo le dije “no, solo sé que la amo y quiero hacerlo con usted” entonces ella comenzó a besarme desabrocho mi pantalón empezó a bajármelo, me quite los zapatos como pudieron mis pies y me termino de quitar el pantalón, yo hice lo mismo termine de quitarle el pantalón, le quite los zapatos y empecé a besar una de sus piernas desde su pie hasta llegar a su cintura seguí subiendo besando su vientre hasta llegar a sus pechos y tuve que pelear con su brassier porque no se lo podía quitar, cuando se lo quite la seguí besando y comencé acariciar sus pechos, los besaba, los rosaba con mi lengua luego empecé a chuparlos era su bebe y ella me daba de mamar, seguía lloviendo y hacia frio así que dispuse adentrarnos en las sabanas de mi cama para estar más calientitos, yo ya estaba demasiado excitado y mi pene ya estaba erecto, ella empezó acariciar mi pene por encima de mi ropa interior y yo hice lo mismo acariciaba su vagina muy delicadamente por la expresión de su rostro sabía que le gustaba así que seguí haciéndolo mientras seguíamos besándonos, entonces me dio por meter mi mano debajo de su ropa interior para masturbarla y puede sentir que estaba húmeda, ella hizo lo mismo metió su mano en mi bóxer y comenzó a masturbarme lentamente, la sensación era fenomenal y cada vez queríamos más, que nos acariciábamos más rápido yo iba tratando de meter uno de mis dedos en su vagina pero me daba miedo lastimarla así que mejor bese su vientre hasta llegar a su vagina la bese y fui quitándole su ropa interior despacio cuando se la quite me coloque en medio de sus piernas y baje mi cabeza hasta llegar a su vagina para besarla pero no solo quería besarla así que con mi lengua la acariciaba le encanto tanto que me tomaba fuerte del pelo y gemía cada vez que la penetraba con mi lengua y estuve así por un buen rato disfrutando de los fluidos de su vagina, disfrutándola a ella luego levanto mi cabeza como quien diciendo que parara me detuve y subí hasta su rostro besando su cuerpo entonces ella comenzó a acariciar mi pene empezó a bajarme el bóxer con sus manos y donde ya no pudo me lo quito con uno de sus pies me beso y me dijo “hágame su mujer” y con una de mis manos agarre mi pene lo acerque más a su vagina y comencé a rosarla con él, me fascinaba el rose de mi pene y su vagina sentía como cada vez se mojaba más sentía como sus labios se separaban cuando la rosaba con mi pene una sensación inolvidable cada vez estábamos más excitados y me pene se endurecía cada vez más, veía como mi pene la rosaba, veía como encorvaba su cuerpo hacia arriba de la excitación entonces comencé a besar su pecho, su cuello hasta llegar a su boca la mire a los ojos y le pregunte “¿está segura?” y acento con la cabeza, así que tome mi pene lo acerque a su vagina y comencé a penetrarla lentamente, en ese instante me dio miedo porque no sabía lo que hacía ni lo que ella sentía, me gustaba la sensación pero ella se quejaba y tenía medio de lastimarla me detuve por un momento, mi pene aun no la había penetrado completamente pero tenía miedo, ella me vio y note por la expresión de su rostro que la estaba lastimando y me dijo “esto lo decidimos los dos” y un impulso vino a mí y la penetre completamente ella grito se agarró de la cama y de uno de mis brazos, cuando vi que estaba a punto de llorar dispuse a sacar mi pene de su vagina, lo estaba sacando lentamente pero ella apretó mi brazo como quien diciendo que no lo hiciera, entonces volví a penetrarla y repetimos lo que hicimos tres veces más lentamente, me encanto sentir como la penetraba pero no solo era su cuerpo si no su alma sentí como éramos uno solo la primera vez que la penetre, saque mi pene de ella me recosté a un lado la abraze fuertemente le di un beso y le dije “lo siento no era mi intención lastimarla” me devolvió el beso y me dijo “no tenga pena yo lo quería también no solo usted, ahora soy su mujer y nadie más, lo amo” la abraze muy fuerte y nos quedamos acostados en mi cama esperando que terminara de llover.
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