….De Chatear al Cola….
( Relatos Heterosexuales )
Era una tarde de domingo gris y pintaba aburrida, la TV no ofrecía nada y me puse frente a la compu a ver que hacían los demás.
Entre a las páginas de chat para ver si podía ponerme a charlar con alguna mujer pero solo había puros vagos en la misma que yo y los habituales de siempre que quieren enganchar hombres y rompen las pelotas preguntando boludeces. Fui cambiando a distintas páginas hasta que resolví meterme en una que pertenece a mi ciudad. En mi condición de casado y siendo peligroso jugar en el área local, dado la existencia de cada tarada y tarado en el chat me puse a jugar sin expectativa alguna.
El Nick tenía que ser llamativo y como me gustan las mujeres tirando a maduras y todas están un poco mambeadas me puse el nombre del padre de la psicología sex… “Sigmund Freud” para ver el resultado.
El Nick dio su efecto ya que a cada rato me pedían privado con la pregunta de rigor que si yo era psicólogo… a lo que respondía con evasivas y trampa dialéctica como para no afirmar ni negar. Eso me permitía indagar en el submundo femenino del anonimato del chat en el que ambos podíamos poner lo que queríamos y decir lo que nos salía de la testa. Esto me permitió sacarme de encima una parva de putos que lo que menos quieren es redimirse en su sexualidad y me saca del lugar de presa sexual. Al tiempo de chatear simultáneamente con dos o tres minas, se fueron descartando en la medida de la complejidad de la charla hasta que por ultimo me quedo una de ellas con el Nick AFRODITA48 el nombre elegido es de claro significado… diosa del sexo y que si lo había elegido para chatera en su imaginario debía estar la fantasía de satisfacerse por lo que creí que por ahí podía tener el camino mas allanado para mi clara intenciones perversa. La psicoanalítica charla fue cambiando de rumbo y llevada a lo netamente sexual en el menor tiempo que pude aunque creo que ella también tenía esas intensiones. Fue así que empezamos con temas subidos de tonos y de alto contenido erótico. Yo tenía una calentura sideral a tal punto que como un adolecente me acariciaba el pene mientras escribía cosas que la calentara a ella en lo que suponía que del otro lado, estaba sucediendo lo mismo. No soy un experto en la tecnología de la compu pero me propuso ir al skype si bien lo tengo en la maquina lo he usado un par de veces pero accedí el desafío. Me paso su nombre del que también era “afrodita” pero con otro número que no daré por preservarla… cerré todas las páginas que tenia abierta y espere con impaciencia que apareciera o me agregara. Se hizo interminable y llegue a creer que había sido su estrategia para deshacerse de mí. Me prepare un café enchufe los parlantes para escuchar cuando se conectara o me llamara. Tardo varios minutos cuando de pronto suena el llamador del skype. Acepto la llamada y empezamos a chatear por ahí. Volví rápidamente a la charla caliente con la idea de avanzar. Ella se engancho al toque hasta que le pedí si tenia cámara a lo que me dijo que si pero que no le gustaba mostrarse, insistí en vernos por cámara aunque mas no sea parte de nuestro cuerpo como por ejemplo sin rostro si tenia problema para no exponerse a fines de jugar un poco, aunque debo confesar que temía que su cuerpo no sea de mi aceptación y el mio el de ella. Ya sin esperar respuesta encendí la mía enfocando mi pecho… en lo que exclamo los típicos mmmmm de rigor y poco a poco fui mostrando mi anatomía como si fuera un despiece del cuerpo humano… Cuando de pronto corto todo y volvió a pedir conexión… pensé que se había cortado internet pero no era así… por el contrario, cuando acepte, apareció un cuerpo femenino en ropa interior color azul eléctrico con generosas formas y muy apetecible… era mi afrodita que se exponía del cuello para abajo. La sensación que ella estaba del otro lado y yo de este con las mismas intenciones me éxito y se lo mostré explícitamente con movimientos seductores. Me sentía un pelotudo delante de la cámara masturbándome para una mujer de mi edad. Ella también se tocaba, esto parecía como un disparador de esa energía en el arte de masturbarse, pero como siempre voy por mas, le roge sutilmente encontrarnos insistiendo que el grado de complicidad que teníamos ya era tal que el encuentro personal nos obligaba a la discreción y al secreto a los dos y que cualquiera fuera el resultado de que si nos conocíamos o no, quedaba entre nosotros y nada mas. Dudo mucho y anduvo con evasivas mientras por mi insistencia se enfrió la cosa y cuando me dijo que lo dejáramos para otro día empecé a decirle las cosas que estaba con ganas de hacerle con lujo de detalles a tal punto que escribía a toda velocidad para tentarla mientras ella atentamente leía… vi que estaba absorta paralizada examinando cada párrafo indecente que escribía en la que ella era mi victima o yo la de ella…. Cuando de pronto intempestivamente me pone la dirección y corta el chat….
Allá fui, un departamento último piso del centro de mi ciudad, ….Me vestí a las apuradas me puse perfume y salí despavorido para el encuentro-. Toque el portero, jugado a que fuera una joda, pero por suerte atendió una mujer con vos muy suave y lenta en el hablar. Me quede mudo y se noto que corto. Volví a tocar el portero y volvió a repetir quien es? a lo que respondió el Freud y me sonreí. Se quedo en silencio y sentí la chicharra de la puertas todo era medio extraño pero probable y parecía que venia por un tubo. Subí al ascensor y me dirigí al 9 B donde una puerta entre abierta me esperaba. No se por qué uno se mete en cada bretes por calentura no?... cuando ingrese me encontré con un departamento en penumbra bien arreglado y detrás de la puerta estaba mi presa. Cuando nos enfrentamos éramos dos desconocidos físicos, totalmente extraños con un solo objetivo común… cogernos... y así sucedió me miro a los ojos y me estampo un beso de lengua que me alivio las tensiones, su boca era una ventosa y su lengua invasora estaba totalmente decidida a todo y yo igual, me sentí invadido pero esa actitud devoradora me estimuló y me daba mucho morbo. La abrace y con mis manos, recorría su piel ya que ella ni se había vestido solo se había cambiado la ropa interior que ahora era de color negra y de encaje a lo perra de fotografía. Sus besos de una fogata que encendía mi combustible interno, deje el estado pasivo par ponerme acción, me fui despojado de la ropa mientras me llevaba a la pieza donde un televisor y oficiaba como un de velador psicodélico. De pie nos fuimos acariciando cada parte de nuestros cuerpos mientras mi ropa termino pisoteada en el piso por nuestros movimientos embarazoso. Voy a tratar de ser concreto y descriptivo en la forma de mi diosa afrodita... Su cabellera, negra. Su piel blanca con un seductor aroma, emanaba una libertad de acción… Sus ojos marrones y desorbitados… cuando lo abría denotaban su fiebre contenida en la mirada… se contorsionaba rozando sus hermosos y abundantes pechos contra el mio. Podía sentir el pezón erecto erizado acariciando mi pecho tras su sostén. Mis manos acariciaban su espalda recorriéndola desde la nuca a su cóccix con una suavidad de amante en el que ella respondía con suspiros de placer. Mi actitud fue tomando la posición de un macho más enérgico y desfachatado apretando sus nalgas y buscando reconocer cada uno de sus pliegues y curvas. Los besos, un interminable fluir de aliento rítmico y acuosos fluidos por el camino de nuestras lengua en el rostro y cuello. Su pelvis contra la mía se empezaba a frotar buscando sentir mi bulto tras la poca ropa. El placer que nos causaba no nos permitía destrabarnos de ese baile sexual de música imaginaria. La cama a nuestro lado esperaba ser usada pero no abandonábamos el acto de entregarnos de pie con los bamboleos y seductores movimientos. Fui recorriendo su cuerpo pasando mi mano por detrás con los esfuerzo de poder llegar a su concha. En un instintivo movimiento paro la cola para que mis dedos llegaran a su raja… toque su rendija húmeda por su néctar y acaricie en esa mezcla táctil de pelambre, labios carnosos y el hilo dental de su tanga. Eso disparo en mi un morbo y un fetichismo que me enardeció y buscaba invadir mas su interior vedado. Note que se abrió de nalgas y realzo mas su cola mis dedos quedaron mas cómodo y puede introducir dos de ellos con los movimientos de un punguista y arrancar en ella ese disparador para desbarrancarnos en la lujuria total. Nos tiramos en la cama y quedo para arriba entregada a todo. Abandone los besos en su boca para sembrarlos en su oreja y nuca y bajar lentamente con ósculos suaves y mordiscos en su cuello. Invadí sus pechos y me detuve a besar y apretar con mis labios su pezón erecto dejando caer saliva para mojarlos, sus manos me acariciaban la espalda y me guiaban por el camino de su placer con apretones y pellizcos suaves. Mi mano sentían su entre pierna caliente como un tizón encendido, recorrían con caricia la superficie de sus pliegues desparramando sus gelatinosos jugos todo inmerso en ese ambiente de flases por las luces emitidas por la TV. Fui bajando lento degustando cada centímetro de su piel sintiendo el aroma de sus intimidades… destino de esquivo de mi boca… me sumergí con la lengua y comencé a moverla como un bífido del edén… en cada meneo sus suspiros y exclamaciones eran cargadas de mas improperios y desacatados verborrágicos insultos al éter que desataban en mi, mayor frenesís y estimulaban mi libido a la cúspide del placer dado… Recorría sus vagina salivando y engulléndome en ella sin dejar de masajear con mis manos su cola mientras se torsionaba en mis proceder a lo que grito con un: bastaaaa ¡!!!!se incorporo me hizo sentar en el borde de la cama bajo mi bóxer elástico dejando afuera todo mi atributo y empezó a comerse mi verga como una maestra del gourmet se metía cada centímetro sin pudor y se auto atragantaba con ella a tal punto que con sus manos tomo las mías y las puso en su nuca para que yo la sometiera, lo que interprete que le pintaba el sexo fuerte. Siempre fui prudente en hacerlo para no avasallar a la otra persona pero acá tenia la aprobación y el permiso. Mientras me mamaba la pija la apretaba para que se atragantara…. sus ojos estaban lagrimoso era una imagen sádica y placentera que acompañaba con palabras obscenas… Deje caer en el tronco de mi pija un hilo de mi propia saliva para que ella lo mezclara con todos los jugos de su boca. Se enardecía en la medida que aumentaba mi perversión. Casi estaba por acabar cuando me retire con firmeza y le pasaba el glande por todo su cara dando cachetadas de pija que ella intentaba atajar con su lengua. Para participar mas comprometido me acerque y bese su cara, recorrí con mi lengua cada rincón de su rostro. Nos paramos y quedamos abrazados frotando nuestros sexo la volqué en la cama con las piernas en el piso y sin mediar mas preámbulo pase de arriba abajo la pija en es su raja candente y mojada con clara actitud de fomentar el deseo de penetración a tal punto que manoteo mi pene para ubicarlo en la entrada triunfal en la que embestí hasta que se perdió en su interior. Me paralice un instante para acomodarme e inicie los movimientos de rigor. Me volqué sobre ella y besaba sus tetas afirmándome con las manos tomado de sus nalgas. Intentaba darle ritmo sinfónico a mis movimientos pero en el intento solo lograba desafinar mas mi coordinación volviéndome torpe por momento. La asonancia del deseo. Una cama quejosa inundo la habitación y sus susurros se transformaron en suplicas e insultos a lo que respondía con el mismo tenor de circunstancia. Deje de cogerla para cambiarla de posición a lo que sola se dio vuelta quedando apoyada su cara en la cama y en posición de perra en celos meneando su rabo, que con sus manos abría para que entrara en ella. Volví besar su vagina y pasar mi lengua mojada pero con la variante de que me tente de chupar su cola… fue ahí que despertó en un rezo de placer que me indicaba su aprobación de los sentidos así que me detuve a besarlo y jugar con mi lengua… ella se manoseaba las tetas con una mano y la otra se fregaba la concha y yo estimulando ese hermoso ano que se contraía y se relajaba por momento. Salive bien y me moje un dedo el que fui metiendo lento… se quedo petrificada como que la hubiese desactivado sus automáticos movimientos y se deslizo lento hacia atrás para sentir mi dedo mas adentro en una auto penetración de mi falange , mientras con mi lengua acompañaba su introducción con el fin de lubricar y rozar… hice lugar y metí dos y su ano se dilato mas aun… me excitaba la idea de hacerle el culo y todo conducía a ese final anunciado ya que sin una palabra su cola era movida como las perras mueven sus caderas. Me pare detrás sin sacar mi dedo y metí en su concha mojada mi pija que explotaba, entre a moverme en esa posición logrando que cuando ingresaba mi pen…. retiraba mi dedo y viceversa en una falsa doble penetración que la volvía loca. Movía la cabeza revoleando el voluminoso pelo para apartar de su cara y le quedaba desordenado con mechones cubriendo su faz que resoplaba para que no se le metiera en la boca con las bufadas y suspiros. Su orto era fantástico y coordinamos los movimientos en un bamboleo donde el entorno parecía armonizar… el ruido de la cama, los jadeos, el golpe de mi pelvis y las nalgas de ella… era todo sublimen quería en una contradicción devorarme cada imagen y disfrutarla por mas tiempo en contra parte mi estado de explosión se anunciaba en emergencia y con intento de mantenerme el mayor tiempo posible en ese disfrute compartido con Afro… que actuaba como esa diosa mitológica… No tengo ni idea del lapso que estuvimos de esa manera y mi ansiedad me traiciono me retire volcándome sobre todos su cuerpo y al oido le dije – quiero entrarte por el orto bb… me dejas o te obligo???… mi pregunta no pedía respuesta era simplemente una afirmación… a lo que respondió:- si mi amor es tuyo….
La cola esperada…:
Se reacomodo juntando sus rodillas y se expuso dejando su cadera y sus curvas extraordinariamente armónica y de una femineidad increíble. Me hipnoticé por un momento que me hizo volver en si con una sacudida en la que sus nalgas se movieron con vibrar gelatinoso. Separe con mis manos sus cachetes su cola se contraía, tal vez por ese advenidero dolor de placer. Baboseé sobre su culo y apuntale mi glande en el orificio y con lento y constate empujar fui entrando en su interior vedado. Sin una palabra sin un gesto solo me miraba por entre sus hombro y note que ella empujaba contra mí. Se perdió totalmente hasta juntar mi pelvis con sus nalgas. Todo adentro de ella unidos en mi placer pleno y su dolor (se notaba su experiencia) me mantuve un tiempo y comencé a moverme con destreza manteniendo el cuidado, quería cogerla por ahí hasta mi clímax total y que si fuera posible hacerlo eterno…. Afro comenzó movilizarse… se podía decir que me masticaba y removía su cola mientras se masturbaba con la mano en lo que por los gritos y por lo que después me confeso, de sus multi orgasmos. Debo suponer que sola se arrancó mas una acabada… mientras entraba y salía viendo como ese culo se abría y me permitía deslizarme dentro de ella. Hice algunas interrupciones en la que la sacaba totalmente para ver como introducía de nuevo ya no tan suavemente si no con cierto espíritu sadista infligiendo dolor y placer que respondía con unos gritos e insultos con amenazas en la que no permitía que parara o concluyera… No podía contener más mi lava de placer y se lo dije en la forma mas burda que uno tiene en esta circunstancia. Ella se detuvo en su locura de los movimientos y ya con bufadas siento que entre sus piernas acariciaba mis testículos apretando por detrás cerca de mi culo, lo hacia como si supiera cada detalle de la anatomía del hombre, por que sus sentido de ubicación era perfecto me sostuve de acabar y le manifesté que sus movimientos darían la bajada de bandera final a mi desfallecer de placer… literalmente no daba mas… La miré como perro abotonado… ella dejo de tocarme observo que mete los dedos en la boca y lo salva bien se tuerce entre las piernas me roza los testículos y apolla el dedo en mi culo… me siento que me devuelve la gentileza metiendo su dedo en mi y en la medida que lo mueve mi pene inyecta en su interior toda mi leche que a borbotones no paraba de depositar, debe haber sido el polvo mas estimulado de mi vida…. cuando mis furiosos sonidos de la eyaculación culminaron me quede petrificado con su dedo en mi culo y mi pija en el de ella…. Despacio fu sacándolo y me volqué al descanso del guerrero en su espalda. Mi pene fláccido afloró de cola. Nos deslizamos en la cama para acostarnos más cómodos y volver en si de esa mini muerte que tiene una acabada descomunal como esa… no me miraba a los ojos, como si la vergüenza se hubiese apoderado de sus ojos, la acaricie como un amante enamorado de su alma… La recorrí por los lugares que anduve y se denotaba mojada por los fluidos de ambos. Ella apretó mi bulto por arriba y me estampo un beso de lengua que me quito el aire… se retiro cinco centímetro y venciendo su la vergüenza me pidió que me fuera sin preguntar nada y que me olvidara de todo lo sucedido… con claras intenciones de borrar de su historia la complicidad de haber intimado con migo por el solo acto corpóreo y calentura del momento. Al menos así interprete la situación.
Sorpresa la mía… unos tres meses después me la presento mi mujer como una colega con la que había hecho un curso… disimule y disimuló con la diplomacia de rigor saludo y se fue caminando y moviendo sus fantásticas caderas, que quedaran en mi memoria por siempre como la diosa afrodita que fue.
Eros44
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