Estábamos tomando con un amigo en su casa un día sábado, su nombre es Juan Carlos, ya habíamos tomado un poco mas de la cuenta, pero eso no importaba ya que cuando uno es joven hace cualquier cosa, en fin, eran como las 12 de la noche y estábamos jugando con su Nintendo, me acuerdo que era un juego de fútbol bien entretenido, en eso me dice que para ser mas interesante el juego hay que hacer una apuesta, yo le dije que ya, ya que pensaba que la apuesta iba ser tomar un vaso de cerveza sin parar o algo parecido, que errado estaba. Después de haber perdido pedí la revancha, entonces Juan Carlos me la dio, también me gano así que le debía ahora dos castigos.
Para el primer castigo, me llevo al cuarto de su hermana y saco unas ropas del closet de su hermana, me acuerdo que era una minifalda negra, un top plomo, una ropa interior de encaje que el bikini era en forma de trusa y el brasier era normal, un porta ligas, también me dio un par de medias pantys y un par de zapatos de tacos altos negros. Se volteó a mí y me dijo, como primer castigo te debes de vestir como una mujer para mí. Yo por supuesto me negué ya que eso no estaba dentro de mis planes, yo pensaba otra cosa, después de discutir por un largo rato y por culpa del licor acepte no de muy buen agrado hacerlo. Le pedí que saliera de la habitación para cambiarme, él satisfecho por imponerme su castigo, me dejó solo en la habitación de su hermana.
No sabía por donde comenzar a ponerme esa ropa, simplemente me desnudé y comenzé a ponerme la ropa, primero me puse el bikini el cual se me metía todo entre mis nalgas, de ahí me puse el brasier el cual me demore bastante tiempo en abrocharlo y lo rellene de algodón, de ahí me puse el porta ligas y luego las pantys, luego de eso me puse la minifalda y por último me puse el top. Al verme al espejo no podía creer como me veía, me gusto como me veía como mujer ya que de sólo verme me excite un poco, después de quedarme mirando un rato al espejo pude observar que también había maquillaje en el cuarto de su hermana, así que decidí pintarme para darle mayor realismo al castigo. Así que use un lápiz labial de color rojo, un delineador de ojos rosado, polvo para la cara, use unas sombras de color rosado un poco mas fuertes que el delineador y por último use un perfume que me gusto mucho el olor.
Antes de salir me miré por última vez al espejo y realmente observé a todo una mujer, todavía no podía creer el cambio que había echo, nunca pense verme tan bien como mujer. Al salir le dije que ya estaba lista, Juan Carlos me dijo que me esperara un ratito, al ratito me dijo que saliera, me quede sorprendida al ver que tenía una cámara de vídeo en la mano y me estaba grabando. Yo traté de entrar al cuarto pero él me dijo que ya era muy tarde y me había grabado, además me dijo que me veía muy hermosa y no tenía porque esconder nada. Yo me quede pensando un rato y decidí quedarme sin importar que me estuviera grabando, así que le pregunte que tal el cambio, Juan Carlos me dijo que me veía muy hermosa y que le gustaba mucho. Me ordenó como segundo castigo que modele delante de la cámara, yo como me sentía en el cielo comencé a caminar modelando, moviendo un poco mas de lo debido mi trasero y todo eso.
Al terminar de modelar, Juan Carlos dejó la cámara a un lado y se acerco a mí, yo estaba temblando ya que no sabía que hacer, él me agarró de la cintura con una mano y con la otra me agarró del cuello, me dijo que me veía muy hermosa y que le encantaba verme así, después de decirme eso me dio un beso que nunca olvidaré, me encantaba estar entre sus brazos sentirme su mujer, en pleno beso el baja su mano y comienza a manosearme, para este momento yo ya estaba muy excitada así que lo deje hacer lo que él quiera, me siguió besando y su mano comenzó a explorar dentro de mi minifalda, me pasaba un dedo por encima de mi trusa y tocando mi huequito, eso me hacía delirar. En eso me da la vuelta y comienza a rozar su pene, que ya estaba bien crecida, contra mi trasero haciéndome sentir toda su masculinidad, después de hacerme eso, se bajo el pantalón que llevaba puesto y saco su pene, que ya estaba bien erecto. No podía creer que me estaba pasando eso y como estaba excitada pues lo permití, pero no voy a negar que me gusto mucho el pene de Juan Carlos que para su edad era bien grande y grueso. En eso me agarra una mano y se lo lleva a su pene, yo tímidamente se lo agarro y lo comienzo a mover de arriba para abajo, Juan Carlos se me acerca y me dice, quiero que me lo chupes, yo no sabía como hacerlo pero tampoco quería defraudar a mi hombre, así que hice mi mejor esfuerzo, me arrodille ante él y comencé besándolo, de ahí le pase la lengua y note que no tenía un feo sabor, es mas podría decir que me gusto el sabor que tenía, no esperé mucho y me lo metí a la boca y comencé a moverme teniendo mucho cuidado de no dañarlo con mis dientes, él comenzó a gemir de placer creo que le estaba gustando mucho, yo por mi parte también estaba gozando de tener ese manjar en mi boca.
Después de estar unos 10 minutos así, Juan Carlos me dice que me quería hacer su mujer, me hace levantarme y me lleva a su cuarto, él va al baño y trae un pote de vaselina, se acerca a mí y me sigue besando mientras su mano me va quitando mi trusa, en eso me voltea y con sus dos manos me baja y me quita mi trusa, se levanta y comienza a frotar su pene en mi culito, sentía como rozaba su pene contra mi huequito, se me acerca a mi oído y me dice que me eche en la cama boca abajo, yo me echo obedientemente encima de la cama, Juan Carlos se acerca y me sube la minifalda con sus dos manos, en eso siento que el me penetra con un dedo lleno de vaselina, me dolía un poco pero mas era el placer en ese momento que el dolor, él me decía que me lo estaba estirando para que no me doliera cuando me penetrara, yo encantada dejaba que me hiciera lo que quisiera, después de un rato me saca su dedo y me dice que ya estoy lista para recibir el premio, yo le pido que sea suave y dulce conmigo, él me dice que no me preocupe y comienza a embarrarse su pene con vaselina, de ahí me dice que abra mis pierna y yo lo obedezco, se echa encima de mí y su pene lo pone en mi huequito, yo tenía mucho miedo de que me doliera pero estaba muy equivocada, ya que me comenzó a penetrar suavemente y cuando veía que me dolía se esperaba un rato, mientras me mordía dulcemente la oreja, así estuvimos un rato hasta que se acostumbro mi huequito, comenzó a moverse de arriba abajo, yo disfrutaba con cada arremetida, me sentía su mujer y eso me encantaba, me besaba, me decía lo hermosa que estaba y lo mucho que le estaba gustando mi culito, también me dijo que fuera su esclava cuando el quisiera, cosa que yo acepte con mucho placer ya que estaba delirando de placer, en eso yo exploto en un total orgasmo mientras el seguía penetrándome, no paraba de hacerlo y en eso siento que el también explota derramando toda su leche dentro mío.
Juan Carlos se quedo un rato encima mío y de ahí se echo a mi lado, yo me volteo y él me pasa un brazo por abajo de mi cabeza, yo puse mi cabeza encima de su pecho, en eso me dice que en adelante mi nombre va ser Veronica y que cada vez que él quiera me va a llamar así, yo acepte y me gusto el nombre que me dio. Y en eso me agarra una mano que estaba en su pecho y me la lleva a su pene, yo comienzo a jugar con su pene y para mi sorpresa se comienza a parar de nuevo, ya me estaba excitando de nuevo así que por iniciativa propia me arrodille en la cama y se lo comencé a chupar de nuevo ahora con un poco mas de experiencia y sin miedo de dañarlo, cuando ya estaba bien parado, me dice que quiere que yo cabalgue encima suyo, yo paso una pierna por encima de él y me siento sobre su pene mientras el lo agarraba, de ahí yo lo agarro y lo llevo a mi huequito que ya pedía mucho mas, en eso me siento suavemente sobre él y ya no me dolía sino sentía un gran placer así que comencé a subir y bajar como si estuviera cabalgando, me encantaba estar así, sentía como me entraba todo su pene dentro mío mientras él jugaba con una mano en mi pecho y la otra me estaba manoseando mi trasero. Después de cabalgar durante un rato, Juan Carlos me dice que pare, y que me ponga en cuatro patas ya que quería hacerme esa pose, yo me puse sin saber como era y en eso siento que pone sus manos en mi espalda y siento todo su pene entrar de un solo golpe, yo solamente pude decir un Ay, ya que me dolió tremenda embestida, él comienza a moverse hacía adelante y hacía atrás y cada vez lo hacía con mas fuerza, yo estaba encantada con su gran pene y no tarde mucho en tener otro orgasmo mas, mientras él seguía embistiéndome con mas fuerza y mas rápido, así duro un buen rato diciéndome: "Veronica eres la mejor chica que he tenido". Yo con estas palabras me derretía y él seguía moviéndose así, en eso para derrepente y se pone delante mío por supuesto quería que se la chupara, yo ni tonta ni perezosa, se la comencé a chupar nuevamente moviéndome hacía arriba y abajo rápidamente, y con la ayuda de mi mano que también hacía lo mismo, Juan Carlos me desparramo toda su leche en mi boca, su leche fue un manjar que me gusto mucho su sabor, después de limpiar todo su pene, me lo comencé a pasar por toda la cara dándole besos como si fuera un trofeo.
Después de eso para Juan Carlos yo soy Veronica y me hace vestirme de mujer cada vez que él quiere, tengo otras historias pero se las contare en otra ocasión. Espero les haya gustado tanto como a mé me gusto.