Los Empleados 3.
( Relatos Gay )
La señora Michelle, le ha llamado al mayordomo a la sala de estar. José, como está usted hoy? Bien señora. Pero José no la veía mucho a los ojos, sabía lo q había pasado el día anterior con ella. Pero aparte, también se sentía usado en su interior pues la señora le había metido dos dedos en su ano. Este joven José, el mayordomo, era de origen latino, blanco cabello negro. Delgado y no muy alto. Su ropa de mayordomo le quedaba bien y le ajustaba a su cuerpo y frente, notandosele e bulto cuando se le paraba. Bueno José, porfavor, llamale al empleado q lava la alberca. Dile q porfavor suba al cuarto de huéspedes que tiene la puerta café. Q me vaya a ayudar. Que deje de hacer lo q esta haciendo y que pronto lo espero. Si señora. Y el mayordomo salió a la alberca y le habló a Wiliam. Que dejes eso que estas haciendo y subas a ayudar a la señora allá en el cuarto de visitas del lado izquierdo. Si señir, así le dijo al mayordomo. Wiliam era un muchacho alto, güero, tipo americano del norte. Por estar lavando la alberca, traía un short color anaranjado plastificado corto. Y una playerita ajustada son mangas blanca. Sus chancletas, se seco y fue a la habitación donde estaba la señora ya medio tendiendo la cama dándole la espalda a la puerta de entrada. Y lógico que Wiliam solo la veía y relamia pues la señora le estaba dando rico picón de ojo con su tracero en tallado en bata de satin amarilla y trasparente y se le trasparentaba su pantaleta en negro. Y el resorte de su bra también negro. Vaya señor Wiliam.. Parece q no me uiere ayudar.. Le dijo la señora
Y Wiliam se despertó de su estupor. Ahh.. Si, si señora. En que le ayudo??. Mire, necesito me baje del closet las cajas de hasta arriva. Ahí hay unas fundas para almhoada. Y Wiliam se subió a un banco y se estiró para alcanzar esas cajas. La señora se le acercó mucho y le dijo.. Wiliam, que rico hueles!!.. Wiliam se sorprendió con ese comentario.. Y no creas q no me fije que me estabas viendo el tracero.. Ay señora. Perdón y disculpe.. No, o te preocupes Wili.. Y este... Alcanza pues las cajas.. Si señora. Wiliam estirndose mas y la señora aprobecho para tocarle su bulto sobre su short.. Ay señora, que esta haciendo.. Nada Willy nada q no te guste. Lo volteo frente a ella y así el sobre el banco, le bajó el short. No traía nada más que esa prenda anaranjada y se lo bajó a los pies.. Señora porfavor..!!! Que??!!.. Dime que??!.. No, nada señiea, nada. Michelle ya empezaba otra vez con sus travesuras pero ahora ya con Wiliam. Tocó y sobo su miembro. Wiliam cerró los ojos.. Michelle le empezó a pasar su lengua húmeda sobre la punta de su miembro que empezó a empalmar se ya ahora, dentro de su boca. Señora.. Señora!!.. No hay problema Wiliam, solo dejate hacer. Y así lo tenía parado sobre el banco frente a ella y ya mamáo esa poderosa verg rosada y gruesa. Pero al igual que como con José, también empezó a acariciar las piernas, muslos, entrepierna, testículo y por detrás, sus duras y gruesas nalgas. Señiea.. Me hace gozar... Chiiiit!!.. Calla..!! Wiliam con los ojos cerrados y Michelle con su palo metido hasta la garganta. Y sus manos posadas sobre sus nalgas, sus dedos tratando de entrar entre sus glúteos.. Hasta que Wiliam cedió. Aflojando las pompas sintió esos dedos igual entre los glúteos.. Ay señora. No lo haga por favor.. Porfavor no!!.. Ya la señora le había introducido un par de dedos en su orto recién vio lado por esos dedos lujuriosos.. No señora, no.. Ahh.. Pues vente entonces. Lo jalo del banco casi tirándolo y llevándolo a la orilla de la cama, donde ella se quito la bata, enseñándole totalmente su espalda con brasiere y sus pompas hermosas en pantaletas. Poseeme Wiliam, que ya no aguanto sin mi esposo.. Meterme tu palo y hazlo sabroso, vrico, duro, rudo, violento. Dame toda tu verga hasta el fondo. No, pues a quien le dan pan que llore!!.. Wiliam ni tarde ni perezoso le bajó su pantaleta y solo con saliva en sus dedos, la lubrico y penetro así como se lo pidió la señora. Rudo y duro. Se iba a desquitar pirque la señora le acavaba de desvirgar su ano con ese par de dedos lujurioso. Y se iba a desquitar bien y bonito. Por más q le dijo que no le metiera sus dedos, ella fue necia.. Pues ahora ahí le va señora.. Michelle sintió muy duro y grueso el instrumento que le acavaba de llegar hasta las entrañas.. Dame papi.. Dame más fuerte amor.. Esas palabras hicieron q se calentar a de mas Wiliam, al grado de vaciarse pronto dentro del culo de la señora.. Hasta q se aferro a su cintura y dando un fuerte respingo se vacío totalmente dentro de ella. Salió de su culo, dejándose lo lleno de leche que le escurrió fuera de sus pompas. La señora quedó abierta, adolorida, satisfecha y llena.. Se levantó de la cama y se suvio su pantaleta, volteo a ver a Wiliam y todavía se agachó a limpiarle las últimas gotas de esperas qye aún goteaban de su miembro. Le exprimio todo lo que le quedaba aún dentro de sus testículo hasta dejarlo vacío y tembloroso. Wiliam cayó en la cama boca abajo. Débil, sin poderse mover. Y la señora aprobecho ese momento para volver a introducirle otra vez sus dedos lujurioso separando le las piernas a más no poder. Y le dijo al oido. Me lo hiciste demaciado violento y nunca te lo pedí así. Aprobecho en ese momento introducirle una capsula de hormona femenina bien adentro de su culo, y Wiliam ni pudo evitarlo. Wiliam estaba como muerto boca abajo de la cama, como paralizado, como arrepentido por lo que le acavaba de hacer a la señiea, no sabía lo que iba a pasar después. Seguro lo iban a correr. Pero no, la señora solo le dijo, repone Wiliam y vete a tu cuarto. Descansa pir el día de hoy. De esto no sabrá nada ni mi esposo ni nadie. Anda, levántate y vete a tu cuarto.. Así lo hiso Wiliam. Salió del cuarto sabiendo lo que había pasado y sintiéndose ultrajado de su ano. Esta vieja se pasó de veras.. Me dio dedo.. Lo bueno es que me la coji... Y así amigos lectores, esta señiea Michelle, abuso de todos y cada uno de sus empleados hasta mas no poder. Todos los empleados, ya fueran blancos o morenos, altos o bajitos. Asiáticos o americanos, latinos o europeos. Todos todos sus empleados pasaron esas mismas cituasiones con la señora Michelle. Todos terminaron cogiendola o con sus vergas mamadas y vaciadas con la boca y lengua de ella. La única mujer en toda la casa y rodeada de tantos hombres empleados suyos. Pero aparte igual a todos les abrió su ano con sus dedos lujurioso. Con alguno, hasta le metió una zanahoria en el culo porque le hizo sexo oral en la cocina y ese desafortunado fue el cocinero. Un chico coreano, pálido de piel. Delgado más bien flaco. Chaparrito.. Ese pobre empleado si que sufrió con una zanahoria metida en su culo recién reventado en ese momento. La señiea Michelle, estaba ya casi terminando de cumplir, sus más bajos instintos sexual es con todos sus empleados. Estaba pie llegar su amigo Jan a la estación de ferrocarril. Y le pidió al chófer, otro empleado también abusado por la señora, que la llevara a pie su amigo francés y modisto. Su amigo Jan. Pronto les contaré que tanto pasó con Jan en casa de Michelle. Lo que sí les anticipo es que Jan fue usado y violentado por todos esos empleados jóvenes.. Ya les platiare en próximo relato. Esperen lo con ansias, con el culito abierto, caliente y lleno de esperas del macho que se los esté cogiendo. Saludos a todos.
Comentarios
Se esta poniendo interesante la serie! Gracias Cesareo por tanto escribir y entretenernos! Que hembra más traviesa esa Michelle!
Escriba aquí su comentario sobre el relato:
Opps! Debes iniciar sesión para hacer comentarios.
Detalles
cesareo
Nombre do Relato
Los Empleados 3.
Codigo do Relato
8175
Categoria
Gay
Fecha Envio
09/ago/2022
Votos
2