MI CALIENTE TI COQUI (2ª PARTE)
( Relatos Amor Filial )


Recordaran el encuentro que tuve con mi tía coqui, en la cocina de su casa, después de regresar de comprar unas cosas y dejar a mi tío en su trabajo. Para recordarlo mejor, deberán leer la primera parte de este relato. Me dijo que se iría a bañar y después bajaría para que desayunáramos. Pero no quise esperarla, así que la seguí a su habitación.
Al llegar a su habitación, escuche el ruido de la regadera, fui directamente hacia el baño y al abrir la puerta encontré el espectáculo más cachondo que hubiera imaginado. Mi tía completamente desnuda apoyada en la bañera, su cabello mojado descansaba en sus hombros, sus tetas a pesar de su edad, estaban firmes y duras, de mediano tamaño, pero blancas como la leche y coronados con un pezón muy duro y paradito, su vientre liso por donde resbalaba el agua que caía de la regadera y su mano, su mano jugaba con su panochita masturbándose bajo el agua. Eso me calentó de nuevo, al mismo tiempo que me hacía sentir mal, porque había dejado insatisfecha a mi tía. Ella se quedó viéndome, como invitándome de nuevo a tomarla.
No perdí tiempo me quite la ropa completamente y me abalance a sus pies, me puse entre sus piernas y mi boca alcanzo su panochita, mis labios tomaron sus labios vaginales que estaban mojadisimos y comencé a chupar y tragármelos, mi lengua empezó el entra y sale hasta que alcance su clítoris y le comencé dar mordiditas, con mis labios y también con mis dientes. Mi tía parecía loca, gimiendo y gritando de placer.
-aaaaaahhhh siiiiiiiii aaaaaaagggggggg aaaaaaaaahhhhhhh Mmmmm mmmm que placer mi niño, me matas bebe aaahhhhh
-cógeme bebe cógeme, aaaahhhh me vuelves locaaaaaa aaaaahhh que rica lengua mi vida aaaaaahhhh
Quiso zafarse, cuando le llego el orgasmo, -aaaaaaaaahhhhhhh- alcanzo a gemir o casi gritar, pero la mantuve firmemente por las piernas y seguí lamiendo y metiéndole mi lengua por ratos, hasta lo más profundo que llegaba, hasta que comenzó a temblar y me tomo de los cabellos para someterme y dejarme clavado en su panochita, casi no podía respirar, pero era delicioso lo que estaba sintiendo en ese momento, jugos y jugos escurrían de su vagina y yo los juntaba con mi lengua y los llevaba a mi boca para tragármelos.
Cuando se calmó, me levante y con la cara y la boca mojada de ella me lance sobre su boca y la bese con pasión, se encendió al sentir que estaba chupando sus propios jugos, y su lengua entraba y salía de mi boca, y lamia mi cara como queriendo secarla de sus propios jugos. Aproveche el momento y mi verga comenzó a entrar en su vagina. Dio un grito y se aferró a mi como queriendo que no fuera a salirme
-mmmmmmm aaaaaaagggggggg
Comencé el mete y saca, lentamente y conforme pasaba el tiempo, iba acelerando, yo aún no me había venido, incluso me sorprendió mucho. Así estuvimos un rato, hasta que de nuevo gimió y se corrió salvajemente.
La levante suavemente y me puse a enjabonar su cuerpo de diosa para lavarle completamente, ella también hacia lo mismo, sin dejar de besarnos de vez en cuando a la boca.
Cerré el paso de agua y tome una toalla para secar su cuerpo. Después de que estuvo completamente seca, hice lo mismo conmigo. La tome de la mano y la lleve hasta su cama, creyó que la dejaría descansar jajajajaja, me había lastimado en el orgullo, así que debía aguantarse.
La puse de espaldas sobre su cama y con sus piernas colgando en el suelo, de nuevo me puse de rodillas frente a ella y comencé de nuevo a chuparle su panochita,
-no bebe, ya no, estoy cansada mi amor. Más tarde o mañana te prometo que lo haremos de nuevo, nunca había tenido tantos orgasmos en tan poco tiempo papitoooooo aaaaahhh mmmm así, así, sigue bebe, sigue aaaaagggg
La estaba excitando de nuevo, cuando note que estaba de nuevo mojada, me levante y subí sus piernas a mis hombros y la penetre de un solo golpe
-aaaaaaaahhhhh mi amor mmmmmmm cosita rica siiiiiiiii bebe así aaaaaaaahhhhh mi vida que rico
Con sus piernas en mis hombros, alcance sus piecitos. Uno a uno sus deditos fueron entrando a mi boca mientras mi verga entraba y salía de su panochita, chupaba sus plantas, sus tobillos y de nuevo sus deditos. Que rico sentía el sabor de sus pies. Y por lo que me di cuenta, eso la ponía más caliente.
-bebe te amo, mi vida, que placer me estás dando amor mío. Aaaaaahhhh que ricooooooo, mmmmmmm así bebe, no te detengas, rómpeme la panochita mi vida, cuanto tiempo espere para esto, aaaaaahhhh que feliz me haces mi amor
Sentí como sus piernas las bajaba y se entrelazaban detrás de mí casi lastimándome, acelere el ritmo y de nuevo se corrió como loca.
-aaaaaaaaaaaaaaaaahhhhhh
Se puso de pie y me beso en la boca. –Estoy muerta-me dijo-
No dije nada. La bese también metiendo mi lengua buscando la suya y como dije antes, sorprendentemente aun no me había corrido, así que le di vuelta, hice que se recostara boca abajo sobre la cama, de nuevo con los pies en el suelo. Me agache hasta alcanzar sus preciosas nalgas. Comencé a besarlas a lamerlas a tomarlas con una mano mientras con la otra jugaba de nuevo con su panochita. Mi lengua alcanzo su ano y comenzó a jugar con él, entraba y salía como la lengua de una víbora, rascaba los plieguecitos de su ano y la penetraba para que sintiera como era penetrada por mi lengua.
-mmmmmmm bebe, párteme el culo, si eso quieres, párteme en dos mi vida. Soy tuya, haz conmigo lo que quieras. Aaaaaaaaggg que rico
Poniéndome de pie acomode mi glande en la entrada de su culo y lentamente fui enterrándole mi verga.
-aaaaaaagggggggg despacio bebe, me duele mmmmmmm
Volteo a verme. Deje que se acostumbrara, verla con lágrimas en los ojos me puso sensible. Cuando ella se acostumbró y el dolor dio paso al placer, solita ella comenzó a moverse de atrás para adelante y luego en círculos. Deje que ella hiciera todo, yo me quede quieto para dejarla disfrutar y al mismo tiempo también yo. Supe que no iba a durar mucho tiempo, ella comenzó a acelerar sus movimientos y entonces la tome por la cintura, y fui yo quien le di el ritmo hasta que no pude más. Me corrí dentro del culo de mi hermosa tía coqui. Al sentir me leche caliente llenando sus entrañas, también ella se convulsiono y termino en el orgasmo número que hasta ella había perdido la cuenta-
-aaaaaaaaaa me voy coqui, me voyyyyyyy aaaaahhh, mi amor que culo más rico tienes, me encantas preciosa, no me cansaría de cogerte, eres una zorrita y me encantas.
-aaaahhhh si papi, soy tuya, soy tu zorrita, tu putita, tu perrita, lo que quieras, pero nunca dejes de darme esta verga tuya y esa lengua que me enloquece. Aaaaaaaahhhhh.
Finalmente terminamos juntos y la verdad es que yo estaba muy cansado. Ella por supuesto que también.
-papito, déjame descansar. Ve a desayunar solo, yo estoy muerta. Más tarde no sé qué pueda pasar jijiji.
-está bien mi amor, descansa, mientras seguiré empaquetando las cosas. Si no, mi tío va a darse cuenta que no lo hicimos. Debes tomar fuerzas mamita. Espero que se tarde mi tío y quizá nos dé tiempo de algo más jejeje.
La deje recostada, le puse una sábana encima y baje a desayunar.
(Continuara)
Si quieren puedes comentar.

Besos a todas

                                




Escriba aquí su comentario sobre el relato:

Opps! Debes iniciar sesión para hacer comentarios.

Detalles



Nombre do Relato


Codigo do Relato
4654

Categoria
Amor Filial

Fecha Envio


Votos
1