LA CARTA DEL CONCURSO.
( Relatos Gay )


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    Revisando los papales del difunto Mariano, o como le decíamos entre los amigos. La Mari. Ya que a su muerte teníamos que entregar el departamento antes de tres meses, y bueno como el no tenia a nadie así que la Concha, la Nola y yo estábamos sacando las cosas que dejo nuestra amiga un Puto sin Madre, (expresión que damos para alguien que es un gran ser humano en este medio tan cochino que es la homosexualidad) si un amigo que siempre nos brindo su espacio sin interés ni nada por el estilo, un ser humano como pocos del que siempre recibimos consejos y regañizas siempre pensando que todo nos saliera mejor de lo que intentábamos hacerlo, así que me puse a revisar sus cosas personales, y descubrí esta carta que copio tal y como la encontré:
Srs, del Jurado, esta carta es para la especial madre que la vida me puso espero al menos la lean y no juzguen mis sentimientos.                                                                         Madre no solo es la que engendra y da vida, hay seres maravillosos que merecen ser llamados madre pero que uno no puede hacerlo por temor al que dirán, así es mi caso, este maravilloso ser llego a mi vida una tarde de otoño, en que mi padre recién abandonado, por la mujer que me engendro nos llevo a Mari, yo , a mis escasos 3 años le vi con temor, pero después de 5 minutos, mi corazón ya le pertenecía, cuando llego, estaba meciendo la cuna de mi hermanito, un pequeño de solo 4 meses de nacido, y que al caer la tarde y cuando se marchaba la señora que nos cuidaba, me tenia que sentar a ver la tele que me dejaba encendida y a mecer la cuna, a veces el lloraba y yo no sabia que hacer así que mientras papa llegaba yo mecía la cuna, esa tarde entro con Mari, quien corrió levanto al pequeño de la cuna y lo arropo en sus brazos, ese gesto me indicaba que la vida seria otra con Mari, la mamá que la vida me daba, me abrase de su pierna, y le di mi corazón en seguida y con el niño en brazos preparo la cena, el chiquitín se durmió muy contento una vez que estuvo limpio, y comido, después nos dio la merienda a papi   y a mi asi se inicio con Mari la época mas linda, había de nuevo una Mami en casa, muy distinta pero una Mami, se dedico ha hacernos la vida encantadora, a los tres, yo dormía con papi y Mari, el chiquito en la cuna, pero la cuna paso al cuarto de todos, ahí por la noche era Mary quien se levantaba a darle biberón y arroparlo, temprano, me despertaba el olor de la cocina, con el desayuno de Papá después el despertar y ver a Mary siempre sonriente, que me abrazaba y me llevaba cargando al baño, para hacer de la pipi. Después mi leche achocolatada, mi pan con miel y la fruta que no gustaba mucho mejor prefería las galletas, de Mary aprendí a llevar una casa, con esa persona tan maravillosa iba al mercado, empujando la carriola del niño, de esas manos grandes y fuertes recibí el cariño, el alimento y las caricias que mi mamá me negó al marcharse, por eso y muchas cosas mas el es mi madre, si señores jueces la madre es la que cría, guía cuidad y da la vida por sus hijos y todo eso y mas hizo Mariano por mi hermano y por mi, cuando falto mi padre, el nos dio todo, todo su amor, de madre, su trabajo y nos hizo los seres humanos maravillosos que nunca le dijeron Mamá por el temor al que dirán hoy quiero que todos sepan que él, es la mas maravillosa mamá del universo.
                                  Gracias por leer mi carta,
                                           Anabel
Esta carta me dejo perplejo, jamás me imagine que a un gay le dirigieran una carta y mas llamándole mamá la guarde como un hermoso recuerdo, para que el mundo sepa que un gay puede hacer grandes seres humanos, y no pervertidos como dicen los tontos doctos de la sociedad.
                                           Leodobar.




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Detalles



Nombre do Relato


Codigo do Relato
3725

Categoria
Gay

Fecha Envio


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1